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El Alto Comisionado para España Nación Emprendedora ensalza a Glovo pese a su historial de falsos autónomos

El alto comisionado de España Nación Emprendedora, Francisco Polo, con varios directivos de Glovo.

Laura Olías

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El Alto Comisionado para España Nación Emprendedora del Gobierno, que lidera el socialista Francisco Polo, ha ensalzado la contribución de Glovo por desarrollar “talento” en España. La empresa de repartos a domicilio fundada en Catalunya, pero que ahora está en manos de la alemana Delivery Hero, tiene un largo historial de fraude laboral por uso de falsos autónomos y de deudas millonarias con la Seguridad Social derivadas. También mantiene varias causas abiertas sobre su modelo laboral. En la actualidad, tras la salida de Deliveroo del país, es la única gran empresa que está desafiando la Ley Rider al mantener al grueso de sus repartidores como autónomos.

“Con la Estrategia España Nación Emprendedora tenemos la oportunidad de incrementar las posibilidades de atraer, retener y desarrollar talento. Una meta a la que contribuyen compañías como Glovo”, destacó el martes el alto comisionado en su cuenta de Twitter.

El Alto Comisionado para España Nación Emprendedora es un órgano que depende de la Presidencia del Gobierno. Está “encargado de impulsar la Estrategia España Nación Emprendedora”, recoge su página web en la Moncloa. Este plan busca principalmente “impulsar el emprendimiento innovador” en España, para lo que Francisco Polo se reúne habitualmente con diferentes startups y centros de innovación tecnológicos (hubs).

La visita de Polo al centro tecnológico de la multinacional de las carteras amarillas en la capital surge porque el Alto Comisionado “recibió la invitación por parte de Glovo para visitar su centro de desarrollo tecnológico en Madrid, ubicado en el barrio de Chamberí”, responden desde el departamento dirigido por Polo a elDiario.es.

“Se trata de un hub tecnológico donde se contratan ingenieros e ingenieras, un tipo de perfil profesional que la Estrategia España Nación Emprendedora pretende propiciar: la generación de empleo de calidad”, añaden.

Reconocer “una apuesta por el empleo de calidad”

Sobre el mensaje de Polo en el que ensalza el desarrollo de “talento” de Glovo en España pese a las causas de falsos autónomos y las deudas con la Seguridad Social, en el Alto Comisionado consideran que “es necesario reconocer cuando una empresa realiza una apuesta por el empleo de calidad invirtiendo en un centro como el que ha inaugurado Glovo recientemente”. Se trata de un “centro en el que hoy trabajan 50 profesionales cualificados y que aspira a llegar a 250 ligados a la tecnología en los próximos dos años”, indican en el departamento dependiente de Moncloa.

Desde el equipo de Polo destacan que la Estrategia España Nación Emprendedora “persigue transformar las bases productivas del país para generar un modelo económico que nos permita generar un número mayor de empleos de calidad”.

“Ha sido precisamente este Gobierno quien ha aprobado una norma como la Ley Rider, con el objetivo de que las plataformas digitales tengan que transicionar hacia el modelo de laboralización de las relaciones de trabajo para garantizar la mejora de las condiciones de empleo”, sostienen.

Glovo mantiene autónomos pese a la Ley Rider

Una transición que Glovo no ha hecho. La llamada Ley Rider presume la laboralidad de los riders o repartidores de plataformas digitales y fue aprobada después de que el Supremo se posicionara en este debate y concluyera que Glovo utilizaba falsos autónomos, a raíz de la denuncia de un mensajero. A comienzos de 2021, Glovo debía 16,2 millones de euros a la Seguridad Social en cotizaciones impagadas por los trabajadores y la Inspección de Trabajo había dado de alta como asalariados a 11.000 mensajeros en diferentes actuaciones, según fuentes conocedoras de estas.

Cuando la Ley Rider entró en vigor en agosto, tres meses después de su aprobación, para dar tiempo a las empresas a contratar al personal de reparto, la multinacional anunció que mantendría un 80% de sus mensajeros como autónomos con algunos cambios en sus contratos mercantiles. Solo Glovo se desmarcó de la relación laboral que fijaba la legislación, junto con Deliveroo, que ya estaba de salida del país.

Glovo anunció que contrataría como asalariados a unos 2.000 repartidores. Suponían un 20% de los entre 9.000 y 11.000 mensajeros que repartían para la multinacional, según las propias cifras de la compañía. Pasados los meses, pese a las preguntas reiteradas de este medio, la multinacional no ha confirmado si ha alcanzado esas 2.000 contrataciones laborales ni cuántos riders siguen repartiendo como autónomos con el nuevo modelo implantado.

Según riders contactados por este medio, la empresa ha absorbido un enorme número de mensajeros tras el fin de la actividad de Deliveroo en España. “Como es la que mantiene el modelo de autónomos, ahora hay muchísima gente para repartir”, apunta un mensajero. Esto provoca que haya mucha competición entre los trabajadores.

La Inspección de Trabajo mantiene abiertas actuaciones sobre el modelo laboral de la compañía, tanto respecto al antiguo sistema de autónomos como al nuevo implantado con la Ley Rider, según ha podido saber este medio. En Barcelona hay una gran causa a punto de cerrarse, que puede alcanzar a unos 8.600 repartidores, según publicó El Periódico de Catalunya.

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