El Gobierno vasco prepara para 2026 actos por los aniversarios de las muertes de los dirigentes de ETA Pertur y Yoyes

El Instituto de la Memoria del Gobierno vasco (Gogora) prepara de cara a 2026 sendos homenajes a Dolores González Catarain (conocida como Yoyes) y a Eduardo Moreno Bergareche (Pertur) con motivo de dos aniversarios redondos de sus muertes, el cuadragésimo y el quincuagésimo, respectivamente. Yoyes fue la primera mujer dirigente de ETA y fue asesinada en Ordizia en 1986 por la propia ETA después de que se desmarcara de la organización. El también dirigente 'polimili' de ETA Pertur, de su lado, desapareció una década antes, en 1976, y su cadáver nunca apareció.

Estas iniciativas constan en el programa de Gogora para el próximo año, presentado este martes ante el consejo de dirección, cuya reunión ha presidido el lehendakari, Imanol Pradales. El área de Justicia y Derechos Humanos, en todo caso, está dirigida por la parte del PSE-EE del Gobierno de coalición con el PNV. El Instituto de la Memoria aspira a manejar un presupuesto de 5,28 millones a la espera de la tramitación parlamentaria y posibles enmiendas.

Las actividades figuran en el capítulo de “transmisión social al conjunto de la sociedad vasca” diseñado por Gogora. Además de los actos de reconocimiento anuales y de las presentaciones de libros, se menciona el quincuagésimo aniversario de la matanza de la Policía Armada en una iglesia del barrio vitoriano de Zaramaga el 3 de marzo de 1976 -aquí se impulsa un memorial 'ad hoc' pero en cuya gestación se suceden los imprevistos-, el cuadragésimo aniversario de Gesto por la Paz de Euskal Herria y el nonagésimo de la constitución del Gobierno de Euzkadi durante la Guerra Civil. Hace diez años fue decretado como festivo oficial el 7 de octubre.

Y se mencionan, igualmente, los casos de Pertur en 1976 -sobre el que no existe una verdad oficial- y de Yoyes en 1986. En el segundo caso, el autor material de los disparos fue José Antonio López Ruiz (Kubati), que recientemente aceptó otra condena de la Audiencia Nacional por haber organizado homenajes a expresos de ETA, al igual que dirigentes de Sortu. Se trató de un crimen ejemplarizante contra posibles desertores. “No quiero actuar en apoyo de una lucha que ha degenerado en algo terrible, dictatorial y mítico, contrario a mis valores y sentires más profundos y constantes en mi trayectoria”, había escrito la víctima.

Gogora plantea también iniciar la difusión sobre la represión sexual y de género en el franquismo y sobre los destacamentos penales y batallones de trabajadores. Este organismo abarca las políticas de memoria de la Guerra Civil, de la dictadura, de todos los terrorismos (el de ETA, sí, pero también los GAL, por ejemplo) y los casos de violencia policial.

El documento alude también a “continuar” con la “colaboración” con la EHU (la Universidad pública vasca) para “la inserción de la historia reciente de Euskadi en el temario” de la Selectividad (ahora conocida por las siglas PAU) y seguir realizando actividades con escolares y universitarios. Se plantea ya cerrar en el primer semestre del próximo año la fecha para conmemorar el día de la memoria histórica contemplado en la ley autonómica de 2023. Se mantienen las actuaciones de recogida de muestras de ADN para identificar a víctimas de la Guerra Civil y, singularmente, “continuar asesorando y acompañando a familiares de las personas vascas inhumadas en el valle de Cuelgamuros”, antes conocido como “de los Caídos”.

Señala Gogora que “la memoria no puede ser monopolio de nadie” y que en Euskadi es “previsible” y “saludable” que convivan “diferentes comunidades de memoria”. Sin embargo, la labor de las instituciones pasa por que “todos los relatos” tengan el “mínino común denominador” del “respeto incuestionable a los derechos humanos y la convivencia”. “Ningún relato puede justificar los discursos de odio”, expone el plan de 2026 presentado este martes.

El consejo ha planteado, asimismo, un presupuesto de 5,28 millones. Es una propuesta que ahora se incorpora al proyecto que aprobará el Gobierno vasco y que luego se tramitará en el Parlamento. El director del Instituto de la Memoria, Alberto Alonso, ha señalado que la partida de para investigaciones históricas, por ejemplo, sube un 30%. Entre ellas, ha citado los trabajos sobre diversidad sexual en la dictadura, sobre el Patronato de Protección de la Mujer, un órgano represor del Estado ideado en 1941 y que no desapareció hasta diez años después del fallecimiento de Francisco Franco, o sobre los cargos que integraron, en 1936, ese primer Gobierno autonómico, a cuyo frente estaba José Antonio de Aguirre, del PNV.

Eso será en 2026. Antes, en lo que queda de 2025 Gogora todavía tiene pendiente el Día de la Memoria, que como cada año será el 10 de noviembre y que esta vez tendrá su acto central en Vitoria, también un nuevo encuentro entre estudiantes y víctimas el 1 de diciembre en Barakaldo y unas jornadas sobre el medio siglo de la muerte de Franco, donde se enmarcarían las actividades en relación a los últimos vascos fusilados, Juan Paredes Manot 'Txiki' y Ángel Otaegi, que eran miembros de ETA.