La patronal extremeña Creex solicitará a las empresas impulsoras de proyectos de inversión, como las relacionadas con la minería, que “el valor añadido” derivado de la mano de obra que puedan precisar “se quede en Extremadura”.
“Para que el valor añadido de todas esas extracciones mineras se quede aquí, tenemos que tener mano de obra especializada y empresas capaces de dar respuesta” a las necesidades operativas, complementarias y de bienes y servicios que puedan necesitar, ha afirmado a EFE el secretario general de la CREEX, Javier Peinado.
Tras remarcar que es una “gran noticia” que las iniciativas mineras de Monesterio, Cañaveral y Almoharín hayan sido consideradas “estratégicas” por la UE, Peinado ha dicho que es bueno tanto para Extremadura, “donde no podemos desdeñar ningún tipo de actividad empresarial”, como para “una Europa que debe ser más autosuficiente”. Todo ello, ha remarcado, con toda la protección y seguridad que debe de tener cualquier tipo de actividad empresarial.
A su juicio, un trabajador residente en la zona del proyecto es “más rentable y más productivo que si lo tienes que traer de fuera”, de ahí la importancia de que Extremadura tenga trabajadores especializados y con capacitación profesional suficiente para que puedan participar en los nuevos proyectos.
En este sentido, ha abogado por establecer acuerdos y planes formativos respaldados por la Administración y por las empresas. De hecho, el objetivo es acometer proyectos pilotos formativos de carácter sectorial como ya se hicieron con el despegue de las energías renovables.
Donde no hay mucha ilusión es con respecto al proyecto urbanístico y de ocio Elysium City. “Desde un principio fuimos claros: siempre hemos visto ahí un proyecto más especulador que empresarial”, ha expuesto Peinado, quien, no obstante, reconoce que “el proyecto existe y que sus promotores ya han realizado gastos e inversión”.
“Nosotros apoyamos desde un proyecto de un quiosco de pipas hasta una universidad privada o de minas, pero siempre y cuando sean viables y cumplan con la normativa vigente”, ha manifestado.
Pisos turísticos
Preguntado por el auge de los pisos turísticos, Peinado ha afirmado que no ha escuchado quejarse a los hoteles de esta dinámica, pues los clientes de este tipo de viviendas turísticas tiene un perfil distinto al de los establecimientos hoteleros.
De lo que sí ha advertido Peinado es de la necesidad de un control de hospedaje en los denominados “apartamentos turísticos low cost”, donde a veces se reserva para cuatro personas y se hospedan muchas más.
Preguntado por si dicho incremento del número de pisos turísticos pueda desembocar en “una burbuja insostenible”, Peinado ha recordado que este tipo de alojamientos son impulsados por pequeñas empresas o particulares quienes, en el caso de que decayera el negocio o la rentabilidad, podrían ser transformados en viviendas de alquiler tradicionales.