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Extremadura pone la vista en los viajeros de China y Japón

Turistas visitando Madrid

Pilar Armero

Extremadura fija la vista en los viajeros de China y Japón y la Dirección General de Turismo trabaja para atraer su atención hacia una región que tiene experiencias que ellos buscan. El objetivo no son sólo los que viven en sus respectivos países, sino también los que están en España, unos 400.000 con poder adquisitivo que hacen viajes de fin de semana. El trabajo que está realizando la Junta con los turoperadores persigue “que los paquetes organizados de estos viajeros pasen por Extremadura, donde tenemos historia, catedrales, fiestas populares y gastronomía que están entre sus preferencias ”, indica el Director General de Turismo, Francisco Martín Simón.

El interés por este público no es solo de la Administración regional, lo es también de la provincial y, de hecho, la presidenta de la Diputación de Cáceres y presidenta del Geoparque Mundial Unesco Villuercas-Ibores-Jara, Rosario Cordero, viajó a principios de esta semana hasta China para conocer los geoparques de Yandangshan, Wangwushan-Daimeishan y Sehennongjia, en busca de un hermanamiento que permita abordar estudios científicos conjuntos y promoción del geoparque extremeño.

El Valle del Jerte ya está hermanado con Japón, con quien comparte la cultura del cerezo en flor, y la comarca del norte de Cáceres es, de hecho, uno de los destinos en los que no es raro encontrar la típica imagen de los japoneses cámara en mano. Se les ve también en Mérida, pero simplemente de paso en su viaje hacia Madrid y Andalucía.

Turistas de interior que viajan como mínimo una semana

El interés por los visitantes orientales se asienta en los gustos que chinos y japoneses demuestran a la hora de moverse por el mundo. Huyen del turismo de playa y buscan el de interior. En el caso de los chinos apuestan por la gastronomía y la cultura del vino por detrás de las compras, que ocupan el primer lugar en su lista de preferencias. Los japoneses, tienen la naturaleza como objetivo imprescindible de sus viajes, seguido por la cultura, la historia y la gastronomía. Experiencias que unos y otros pueden encontrar en una Extremadura que, sin embargo, no se lo pone tan fácil a la hora de las conexiones por avión y tren.

“Los motivos por los que no llegan más, a pesar de tener en España cientos de miles visitando los circuitos turísticos, son la falta de medios de transportes para grupos y que sean rápidos y, sobre todo, no estar en los circuitos internacionales”, apunta Victoria Bazaga, presidenta de Fextur, la Federación Extremeña de Turismo.

El turista oriental tiene poder adquisitivo y, además, sus viajes son largos, de entre 10 y 14 días en el caso de los chinos y de una semana en el de los japoneses, según los datos del Ministerio de Industria. A España llegaron en 2014 (última fecha de los datos estatales) un 12,5% del 16,1% de japoneses que eligieron Europa como destino, mientras que el porcentaje de los chinos que lo hicieron fue de un 13,9%. Cierto que no son muchos, pero en cualquier caso, conseguir que algunos de esos días se los dediquen a Extremadura es un objetivo en el que ya se está trabajando.

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