El presidente de la Junta, Fernández Vara, ve “mal” la producción hidroeléctrica en los embalses extremeños en el último año dada la escasez de agua, algo que ha transmitido al Gobierno central para que “de una vez por todas” se tome una decisión, y de hecho hubo una reunión la semana pasada entre ambas partes.
Vara ha respondido así a la interpelación que le ha hecho en el pleno del Parlamento regional este jueves la presidenta del grupo Unidas por Extremadura, Irene de Miguel.
De Miguel ha criticado el incremento de los desembalses para producir electricidad en plena sequía, unos desembalses que afectan más a cuestiones ambientales, como la situación que se produjo y puede repetirse en el parque nacional de Monfragüe, pero que siembran dudas para que en el futuro haya caudales suficientes para poblaciones y algunos riegos.
Los pantanos que más agua están soltando son los de la cuenca del Tajo dedicados al aprovechamiento hidroeléctrico como son Valdecañas, Torrejón Tiétar y Alcántara, mientras que el de Cedillo se mantiene casi lleno para turbinar en el momento oportuno.
La líder de la confluencia de izquierda detecta un aumento de esos aprovechamientos que se están produciendo “a las puertas del tope del gas”, es decir, antes de que empiece a funcionar en junio la excepción ibérica que permitirá bajar el coste de la electricidad a familias e industrias; soltar más caudal para así “seguir teniendo beneficios millonarios a costa del agua de nuestros pantanos en plena sequía. Nosotros, -interpelaba a Vara- no somos rehenes de nadie para decir, sin ningún tipo de cortapisas, que esto es un atraco a mano armada”.
“Vamos a vivir la ola de calor más temprana de la historia, por lo que espero que no siga pensando usted que esto es coyuntural y entienda que no nos sobra agua para seguir haciendo nuevos regadíos”, añadía de Miguel en referencia a su oposición por otra parte a los nuevos riegos en Tierra de Barros.
Nueve meses después de los desembalses “salvajes” realizados por Iberdrola en Extremadura, que provocaron la contaminación del río Tajo a su paso por Monfragüe, “ni ustedes ni el Ministerio de Transición hayan abierto ningún expediente a Iberdrola por estos hechos”.
“Y no solo tenemos que ser testigos de este latrocinio sino que además el señor Sánchez Galán, el presidente de Iberdrola, que cobra 13,5 millones de euros al año, insulta a los consumidores llamándoles tontos”. Unas manifestaciones que según Irene de Miguel no fueron una salida de tono, sino que cree que las realizó de forma consciente “para empujar a los consumidores a la tarifa libre a las puertas de la regulación estatal del precio del gas. ¡Qué manera más despreciable de seguir haciendo caja a costa de las familias!”.
Las eléctricas “nos están saqueando” mientras que el gobierno de Fernández Vara “prefiere mantenerse mudo ante ese continuo saqueo”.
“Me parece muy mal”
“En la actual situación de los embalses me parece mal y como consecuencia de ello le hemos dado traslado de nuestra posición al Gobierno de España”, le ha respondido Fernández Vara, que le ha indicado a De Miguel estar llamando a la ventanilla “equivocada” porque “la competencia para todo lo que usted ha dicho la tiene el Estado”.
El presidente de la Junta ha señalado que ya ha trasladado su queja al Gobierno central en reiteradas ocasiones, por escrito y en persona, “la última vez hace unos días”, para que “de una vez por todas se tome una decisión, que se puede tomar”.
Para Vara, la líder de Unidas por Extremadura se pasa la vida “prejuzgando” con “un desconocimiento tan profundo...”.