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El Delegado del Gobierno en Baleares, Alfonso Rodríguez, ha expresado su desaprobación por las declaraciones del nuevo director general de Inmigración y Cooperación del Govern, Manuel Pavón, quien vinculó la migración con la inseguridad ciudadana. Según Rodríguez, esas afirmaciones “hablan mucho y no muy bien” sobre el perfil del responsable autonómico, y subrayó que su crítica no tiene que ver con que Pavón sea agente de la Policía Nacional, sino con la manera en que ha tratado el tema migratorio.
“Para mí, lo que importa es que ha señalado una relación directa entre migración e inseguridad, lo cual no me parece adecuado”, afirmó Rodríguez en declaraciones a los medios tras su encuentro con la secretaria de Estado de Seguridad, Aina Calvo. Rodríguez también lamentó que las competencias autonómicas en materia de migración hayan pasado de la Conselleria de Asuntos Sociales a la de Presidencia. A su juicio, este movimiento busca permitir que el Govern pueda hacer “política y crítica política sobre el hecho migratorio”, lo que, según él, podría dificultar una gestión coherente y constructiva del fenómeno migratorio en las islas.
Por su parte, Aina Calvo se limitó a no emitir un juicio sobre los nombramientos autonómicos, señalando que “cada uno nombra los equipos que quiere”. Sin embargo, destacó que estará “muy pendiente” del marco competencial y subrayó la importancia del trabajo de las comunidades autónomas en la integración de las personas migrantes y en la convivencia con la población local.
“Las Comunidades Autónomas tienen una tarea ímproba”, afirmó Calvo, quien también destacó la necesidad de una colaboración estrecha entre administraciones. En su opinión, la cooperación institucional es “la mejor receta para hacer frente al desafío migratorio”, advirtiendo que el enfrentamiento entre administraciones solo perjudica a los ciudadanos y a los migrantes.