Un hombre armado con un fusil mata a 59 personas desde un hotel de Las Vegas

59 personas han muerto y más de 500 se encuentran heridas tras un ataque al cierre de un festival de música en Las Vegas al que habían acudido unas 22.000 personas, según ha informado la policía. Los vídeos de los asistentes al festival Route 91 Harvest han captado varias ráfagas de un fusil automático. El ataque es el mayor tiroteo masivo en la historia de EEUU, superando el ataque de Orlando cometido en junio de 2016 y en el que murieron 49 personas.

El grupo terrorista ISIS se ha atribuido la autoría del tiroteo con un comunicado a través de la agencia de propaganda Amaq. La agencia aseguró que el autor del atentado es “un soldado del Estado Islámico”. El ataque fue realizado, según Amaq, como respuesta a las acciones de la coalición internacional, liderada por Estados Unidos, y que combate en Siria e Irak contra los radicales.

No obstante, el FBI ha descartado cualquier vínculo del ataque con el terrorismo internacional. “No existe ningún vínculo conocido entre el tirador y ningún grupo extranjero conocido”, señaló un portavoz del FBI durante una rueda de prensa celebrada en la ciudad.

“Hemos descubierto que había un tirador en el piso 32 del [hotel] Mandalay Bay. El sospechoso está muerto y ha sido identificado, es un residente local”, ha informado el sheriff de Las Vegas, Joseph Lombardo. La policía ha identificado al atacante como Stephen Paddock, un hombre de 64 años de Mesquite, Nevada, y sin conexiones conocidas con el terrorismo. “Creemos que el individuo se suicidó antes de nuestra entrada [en la habitación]”, ha explicado Lobardo.

Algunos medios han hablado con el hermano del atacante, que ha afirmado que “no tenía afiliación religiosa ni política, ni tampoco ningún problema mental”. “No hay nada que decir”, ha añadido.

La policía ha localizado unos diez fusiles en la habitación del hotel en la que se encontraba Paddock, a la que ha accedido un equipo de los Swat con una explosión controlada. “Va a ser una investigación larga y tediosa”, ha asegurado el sheriff Lombardo, quien ha asegurado que no han encontrado nada que pueda explicar las motivaciones de Paddock para cometer el ataque. “Tenemos información que indica que [Paddock] ha estado en el hotel desde el 28 de septiembre. No sabemos si impidió entrar en la habitación al servicio de la limpieza. Ese es un asunto que sigue investigándose”, ha afirmado Lombardo.

La policía de Mesquite, una ciudad de 20.000 habitantes, ha afirmado que Paddock no tenía antecedentes. “No sabemos mucho del señor Paddock. Vive en nuestra ciudad. Las autoridades no han tenido contacto con él en el pasado”, ha informado un portavoz de la policía local.

La policía cree también que ha localizado a la acompañante del atacante que había viajado con él, Marilou Danley. “Tenemos confianza, pero no estamos 100% seguros de haber localizado a la persona de interés”, ha informado el sheriff.

Por el momento, los agentes creen que no hay más atacantes, pese a informaciones previas que apuntan a la posibilidad de que hubiera dos tiradores. La policía ha pedido que se evite la zona y que no se compartan imágenes del dispositivo policial. Los alrededores han sido acordonados y el aeropuerto de Las Vegas ha desviado alguno vuelos “debido a este incidente policial”.

Actualmente hay dos policías en el hospital. Uno está en estado crítico y el otro con heridas menores, según ha informado la policía. “También han muerto otros agentes fuera de servicio que estaban en el concierto. No les hemos identificado, todo lo que sabemos es que eran compañeros de habitación”, ha informado el sheriff Lombardo.

Jason Aldean, la estrella de country que estaba en el escenario en el momento del ataque, ha descrito la situación como “más que horrible”. “Me duele en el corazón que esto le haya ocurrido a gente que solo venía para disfrutar de lo que debería haber sido una noche divertida”, ha afirmado.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha mandado sus condolencias a las familias de las víctimas de este “terrible” ataque. “La velocidad con la que ha actuado la policía de Las Vegas ha sido milagrosa, encontrar tan rápido al tirador es algo por lo que siempre estaremos agradecidos”, ha declarado el presidente en una rueda de prensa en la Casa Blanca. Trump ha anunciado que este miércoles irá a Las Vegas para reunirse con las autoridades y las víctimas y ha anunciado que la bandera estadounidense estará a media asta.

El ataque ha devuelto a primera línea el debate sobre la prohibición de las armas en Estados Unidos. La declaración más destacada ha sido la del senador demócrata por Connecticut, Chris Murphy, que ha hecho campaña por el control de armas desde la matanza en 2013 en la escuela de Newtown (Connecticut). “Esto debe parar. Es irritante que mis compañeros en el Congreso tengan tanto miedo de la industria armamentística que pretendan que no hay respuestas de políticas públicas a esta epidemia”. “Es hora de que el Congreso mueva el culo y haga algo”, ha añadido.

El testimonio de los supervivientes

“Estábamos bajo un foco y alguien dijo ‘apagad la luz’”, recuerda William Walker. “Lo apagaron y se podía ver y oír cómo los casquillos caían al suelo. La gente se escondía detrás de los coches de policía y veteranos del ejército decían ”Dádme un arma, voy a darle a estos cabrones“.

Tomando cobijo bajo una mesa, Kevin Kropf, del Condado de Orange, California, esperó a que llegaran las unidades de estrategia policiales.

“No quería levantarme porque no quería que me pegasen un tiro al confundirme con uno de los tiradores”, dice Kropf. “Había un par de personas cubiertas con sábanas sobre el asfalto, vi a la policía subiendo a una chica a la parte trasera de un camión. La chica estaba claramente muerta… parecía tener unos 20 años y quien estaba con ella, no sé quién era, quizá su marido, también estaba en la parte trasera del camión. Él estaba muy aturdido”.

“Cuando nos tiramos al suelo había un hombre que había sido disparado. Lo estaban intentando sacar, estaba ensangrentado e inconsciente. Lo sacaron y salimos corriendo. Todo el mundo se escondía por todos lados”, ha informado una superviviente a la cadena CNN.

Testigos señalan que los disparos se oían por todos lados -y más cerca cada vez que se escuchaba al tirador recargar el arma-.