El Senado de EEUU ha aprobado este jueves de madrugada la ley de Donald Trump que incluye un paquete de recortes de gasto de 9.000 millones de dólares y que afectan, entre otros aspectos, a la ayuda exterior o a la radiotelevisión pública. La mayoría republicana ha terminado por imponerse para dar vía libre a esta iniciativa de la Casa Blanca.
El principal paquete de los recortes que han recibido el aval de la cámara afecta a la ayuda exterior. Son unos 8.000 millones de dólares. A ello se suman otros 1.100 millones de dólares que pierde la CBP, la corporación pública que financia la televisión PBS y la radio NPR, además de multitud de emisoras locales epartidas por todo el país. Se espera que la Cámara de Representantes dé el visto bueno definitivo a finales de esta semana.
Pese a que la aprobación ha sido holgada gracias a esa mayoría republicana, no se ha hecho sin crítica interna. Dos senadoras han criticado que el Gobierno —poder ejecutivo— trate de tomar la iniciativa en materia de gasto federal que, constitucionalmente depende del poder legislativo.
La vía utilizada por la Administración Trump, conocida como rescissions bills, es poco habitual en el ordenamiento en EEUU. De hecho, la última vez que se aprobó por esta vía una batería sobre gasto federal fue en 1999, cuando todavía era presidente Bill Clinton.
De hecho, en el camino para aprobar este paquete pese a las reticencias de algunos senadores republicanos que se oponían a este proceso para el recorte de gasto, los líderes del partido acordaron eliminar la reducción de 400 millones de dólares en el presipuesto del Plan de Emergencia para el SIDA. La Casa Blanca pretende impugnar esta modificación.