Avance Just Cause 3, locura sandbox a la enésima potencia
Es decir la palabra ‘sandbox’ y enseguida se nos viene a la mente Grand Theft Auto. Es algo casi instantáneo, y razones no faltan dado que la franquicia de Rockstar se ha convertido en el máximo baluarte de este género por méritos propios. Sin embargo hay no pocas propuestas más o menos variadas dentro de este mundillo, empezando por aquellas que aprovechan ciertos conceptos de los sandbox para ofrecer una mayor libertad hasta llegar a otras que lo explotan al máximo con todas las consecuencias.
En este último sentido uno de los máximos referentes en Just Cause, la franquicia de acción desenfrenada del estudio sueco Avalanche Studios, quienes llevan tiempo preparando un Mad Max que promete rescatar la licencia que Mel Gibson llevó al cine allá por los años ochenta mientras desarrollaban en estricto secreto este Just Cause 3 cuyos primeros detalles han desvelado este mismo mes.
Para todo aquel que no sepa de qué va esto de Just Cause, decir que cada nuevo título de esta franquicia nacida en la época de Playstation 2 ha tratado de llevar un paso más allá las dosis de locura y acción, permitiéndonos por ejemplo disparar un lanzacohetes contra el helicóptero desde el que hemos saltado para acabar aterrizando sobre un jeep para salir a escape antes de que un taque y media docena de soldados armados hasta los dientes nos den caza. Sí, nunca ha faltado la pólvora, las balas silbando y las explosiones desmedidas rondando a un protagonista que, como buen héroe de Hollywood, siempre parece salir ileso.
Dando caza al tirano de turno.
A diferencia de lo que suele ocurrir con toda franquicia de éxito, los chicos de Avalanche Studios han optado por medir con sumo cuidado el nivel de explotación de Just Cause, logrando con ello la sensación de que cada uno de sus títulos lleva mucho más tiempo haciéndose de rogar. Esto genera grandes expectativas con cada nuevo juego que anuncian, como en el caso de Just Cause 3, siendo una navaja de doble filo si tenemos en cuenta el notable nivel de calidad de sus predecesores.
¿Qué tienen que hacer desde Avalanche para conseguir que esta tercera entrega nos conquiste? Pues sencillamente mantener su espíritu y potenciar sus virtudes, haciendo uso del potencial que las consolas de nueva generación pueden ofrecer, algo que parecen estar explotando a las mil maravillas si tenemos en cuenta las capturas de pantalla vertidas desde el estudio, de las que se pueden extraer unos efectos de iluminación sobresalientes, cuidadas texturas y una profundidad en los escenarios realmente notable.
Just Cause 3 volverá a situarnos en la piel del superagente Rico Rodríguez, un maestro en sembrar el caos allá por donde pasa. Para la ocasión nos tocará visitar la isla imaginaria de Medici en pleno mar mediterráneo, una isla en la que el General Di Ravello dicta el presente y futuro de sus ciudadanos con plena autoridad, oprimiendo y acallando cualquier voz opositora sin contemplaciones. Como veis parece que no habrá conexión argumental alguna entre este juego y sus predecesores más allá de ciertas referencias, lo que permitirá que cualquiera que no los haya jugado pueda disfrutar sin problemas de esta tercera entrega.
A nuestros pies tendremos un escenario de 1.000 kilómetros cuadrados tan diverso como repleto de posibilidades. Desde zonas tropicales hasta campiñas, profundos acantilados, ciudades y pequeñas aldeas. Y para sacar provecho de la nueva generación, serán más verticales que nunca, favoreciendo una mayor jugabilidad por kilómetro cuadrado, además de contar con no pocos elementos destructibles. Además para esta ocasión también contaremos con diferentes rutas de exploración subterráneas, como cavernas y túneles. Desde Avalanche prometen que el propio escenario será un elemento vivo y variable, tan crucial como el propio protagonista y el mayor de nuestros enemigos.
Por supuesto no todo será pegar tiros en este Just Cause, dado que contaremos con un buen número de objetivos tanto secundarios como primarios que nos permitirán hacer evolucionar tanto al propio Rico como a la facción rebelde a la cual ayudamos a librarse del tirano Di Ravello. Según vayamos conquistando ciertos enclaves, estas tropas ganaran en mejores equipos, armas y vehículos, incrementando su número exponencialmente; al igual que podremos desbloquear nuevos ítems, habilidades y vehículos para nuestro protagonista que podremos modificar y solicitar por radio estemos donde estemos.
Los vehículos en Just Cause son casi tan importantes como las armas o el propio escenario, y para esta ocasión prometen más diversidad que nunca. Encontraremos muchos tipos de coches, motos, jeeps, autobuses, camiones, furgonetas, blindados, tanques, helicópteros, ala deltas y un largo etcétera. Y para poder explotarlos de lo lindo contaremos con diferentes actividades como carreras y pruebas de habilidad, contando cada uno de ellos con sus características propias atadas a las leyes de la física para que sintamos su peso o maniobrabilidad, algo que no estaba muy trabajado en anteriores entregas.
Por otro lado vuelve el mítico gancho, que nos permitirá agarrarnos a casi cualquier cosa, ya sea saliente, objeto o vehículo. Y para esta ocasión podremos llevar a cabo cosas tan alucinantes como casi surrealistas, pudiendo por ejemplo surcar los cielos enganchados a una bombona de butano lanzada por los aires. En cuanto a las diferencias con entregas anteriores, se añade la salud regenerativa tan típica de hoy en día para acabar con la necesidad de buscar botiquines, al igual que se implementa un sistema de alerta en los enemigos que tendremos que cortar antes de que consigan solicitar refuerzos, promoviendo las acciones rápidas para evitar que las cosas no se compliquen demasiado.
Locura de nueva generación.
Con todo lo que sabemos y hemos podido ver hasta ahora, no podemos negar que Just Cause 3 nos llama enormemente, al ser capaz de llevar un paso más allá la libertad de acción y la dosis de locura ofrecidas por sus predecesores aprovechando el hardware de la nueva generación no sólo para ofrecer un apartado técnico superior con unas recreaciones de escenarios y personajes más trabajadas. Por ello no podemos más que aplaudir la decisión de sus responsables de pasar de largo sobre PS3 y Xbox 360 para apostar de lleno por el PC, PS4 y Xbox One. Ahora bien, nos queda saber hasta qué punto conseguirán hacer evolucionar una fórmula jugable más que atractiva apostando por una fluidez superior y un mayor número de posibilidades.
Damas y caballeros, parece que la locura está servida.
