Atentado fallido en la frontera de Colombia y Venezuela

Colombia sigue siendo objetivo de los grupos violentos que operan desde hace años en este país de América Latina. La última actuación ha sido un atentado fallido que ha tenido lugar en Tibú, en Norte de Santander, junto a la frontera con Venezuela.

Allí, el Ejército colombiano ha logrado detectar y desactivar de forma controlada una carga explosiva de alto poder destructivo que había sido colocada en la pista de aterrizaje de Tibú. El diario El Espectador precisa que la operación fue posible gracias a la colaboración de la población civil y la red de cooperantes de las fuerzas colombianas.

Los autores del intento de atentado habían fabricado la bomba a base de un componente de súper anfo que según las investigaciones estaba conectado a un sistema de activación eléctrico controlado. El objetivo sería detonar la bomba durante el tránsito aéreo, con lo que previsiblemente se habrían producido numerosas víctimas.

Las fuerzas del orden no han tardado en atribuir el acto a la autodenominada comisión de frontera de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) , que con frecuencia actúa en la población.

El Grupo de Explosiones y Demoliciones (EXDE) de la Trigésima Brigada del Ejército peinó el área en busca de nuevos artefactos explosivos. La operación obligó a suspender temporalmente los vuelos.

Por otro lado, en la localidad de Neiva (departamento de Huila, centro del país) se detectó la presencia de una pequeña bomba de un kilo de pentolita en una de las ruedas traseras de un microbús, lo que obligó a la Policía a desalojar las inmediaciones y la terminal de autobuses de la población.

El comandante de la Policía de Huila, Flavio Heriberto Mesa, apuntó igualmente a las FARC como responsables del intento fallido de atentado.

Una nueva lucha contra el narcotráfico

Por otro lado, el presidente del país, Juan Manuel Santos, ha defendido un replanteamiento global de la lucha contra el narcotráfico (uno de los mayores males que golpean Colombia) si finalmente el estado de EEUU de California aprueba en referéndum la legalización de la producción, el tráfico y el consumo de marihuana.“Lo dije en las Naciones Unidas, porque no lo he inventado yo, que me digan si hay una forma de explicarle a un campesino colombiano que si produce marihuana lo vamos a meter en la cárcel y ese mismo producto es legal allá. Eso va a producir una discusión global sobre el enfoque que hemos tenido en materia de la lucha contra el narcotráfico”

, afirmó Santos durante una entrevista para Caracol Radio.

El debate, dijo, debe darse de manera global, no individual de los países, y advirtió de que la gente le tiene miedo a pronunciar la palabra legalización, por el estigma que tiene, porque “si la decimos, dicen que ustedes quieren que el crimen se imponga o que el consumo se incremente. No. Entonces lo han llamado despenalización o descriminalización, que en el fondo es legalización, es quitarle el elemento ilícito al tráfico y mas bien usar el producto de los impuestos que se darían al consumo de ese tipo, para tratar de prevenir el efecto sobre la salud pública”.

Santos recordó que una discusión similar se planteó en Estados Unidos durante los debates para la legalización del alcohol, durante el primer tercio del siglo XX, y entonces se decía que subiría el consumo. Y que es una discusión similar a la de hoy con el caso de las drogas.

Afirman que “si lo permite usted, así lo grave con un impuesto muy alto, el consumo se dispara. Eso está por verse. Pero lo que si estamos viendo es que el consumo está creciendo, de todas formas, en países como Reino Unido y España y en qué forma. Cuando la OTAN llegó a Afganistán tenían una producción mínima de amapola, y ahora tienen cinco veces más. Y es lo que esta financiando todo el terrorismo, los talibanes”, manifestó.

Santos matizó que no está proponiendo la legalización de las drogas, simplemente diciendo cuáles son las alternativas que hay sobre la mesa y que esa es una. “Yo creo si vamos a optar por un camino como ese tenemos que hacerlo de manera conjunta, no individual que sería un absurdo, pero estudiemos todas las opciones y ver qué es lo más racional, lo más práctico y qué es sobre todo lo más efectivo, porque lo que estamos viendo es que lo que tenemos hoy no está produciendo los resultados que buscamos”, dijo.

Santos señaló que las mafias de las drogas son grandes empresas que incluso trabajan a largo plazo con su capacidad de penetración en las instituciones. En ese sentido, destacó que Colombia, con mucho esfuerzo, las ha combatido con todos los instrumentos que ha tenido, y ha logrado un éxito relativo.

Pero llamó la atención sobre países como los centroamericanos y del Caribe para que estén alerta y no se duerman ante la posibilidad del narcotráfico, pues dichas mafias, cuando son combatidas como en Colombia, buscan infiltrar y penetrar países con instituciones más débiles.