Fariñas se encuentra ya en su casa
Tras ser puesto en libertad y ser detenido en varias ocasiones en los últimos días, el disidente cubano, Guillermo Fariñas, ha visto como su salud se resentía en los últimos días, llegando a tener que ser hospitalizado el pasado viernes cuando fue arrestado por última vez. Sin embargo, Fariñas ya se encuentra en su domicilio tras sufrir “un dolor en el pecho, con un foco de falta de aire y fiebre”, según ha informado a Europa Press su madre, Alicia Hernández.
Alicia Hernández precisa que se le hicieron análisis de sangre, placa del tórax y se le administró oxígeno, entre otros procedimientos. “Pudiera ser que la semana pasada tuvo una crisis viral. Él está inmunodeprimido, también [sufre] polineuropatía nutricional crónica que él tiene de todas las anteriores enfermedades”, relata su madre, quien apunta finalmente a que Fariñas presenta una leve inflamación en el pericardio. “Podría ser pericarditis, pero hay que seguir estudiándolo”, añadió.
Los doctores que le atendieron desaconsejaron que continuara bajo custodia policial, por lo que Fariñas pudo volver a su domicilio de Santa Clara. La semana que viene un angiólogo le someterá a un chequeo.
Fariñas fue detenido junto a una quincena de disidentes. Hernández no supo precisar si estos también quedaron en libertad, pero sí resaltó que en esta ocasión las fuerzas de orden no les infligieron malos tratos.
Los opositores se habían reunido el viernes para ofrecer una ofrenda floral al político y poeta José Martí. Tras caminar apenas unas manzanas, fueron detenidos y “los condujeron para las distintas unidades en los distintos carros”, relata la madre de Fariñas.
Nueva huelga de hambre
Por otro lado, una nueva huelga de hambre vuelve a ser iniciada por uno de los opositores al régimen de Rául Castro. El pasado viernes, Alejandrina García, una de las Damas de Blanco, comenzó una huelga de hambre para exigir la liberación de su esposo, Diosdado González Marrero, y de los otros diez opositores cubanos que gobierno cubano se comprometió a liberar en julio y que todavía están en prisión.
González Marrero forma parte del grupo de opositores de la Primavera Negra
arrestados en 2003 que se negaron a viajar a España, a diferencia de otros 40 prisioneros de conciencia que aceptaron la propuesta de abandonar Cuba a cambio de su liberación.
García ha explicado a Europa Press que hasta la fecha las autoridades cubanas no han informado sobre la excarcelación de los 11 presos políticos de la Primavera Negra que debieron ser liberados en un plazo máximo de 4 meses, contados a partir del 7 de julio, cuando el Arzobispado de La Habana anunció el acuerdo alcanzado con el régimen, que contó con la mediación de España.
“No estoy de acuerdo con las huelgas de hambre porque respeto la vida,
pero no encuentro otra forma de exigir al gobierno que excarcele a mi marido y siento que no puedo quedarme de brazos cruzados“, ha expresado García en declaraciones telefónicas desde su vivienda en la provincia de Matanzas.
García había informado al arzobispo de La Habana, cardenal Jaime Ortega, de su intención de comenzar una huelga de hambre a través de una carta que le dejó en su despacho el pasado 18 de enero. “Yo le expliqué las razones de mi decisión, pero todavía no me ha respondido”, ha indicado.
Por otro lado, la opositora al régimen de Castro aprovechó su visita a La Habana para preguntar ante el Departamento 21 de la Seguridad del Estado sobre la situación de los 11 prisioneros de conciencia que no han sido liberados, pero los oficiales le han dicho que “no saben nada de eso y que se trata de un proceso lento”.
El gobierno de Raúl Castro ha asegurado, según el Arzobispado de La Habana, que excarcelará a todos los opositores que se quieran quedar en Cuba, aunque no ha mencionado una posible fecha. Hasta el momento, solo ha sido liberado mediante licencia extrapenal el economista Arnaldo Ramos Lauzerique, quien ha decidido quedarse a vivir en La Habana.
Sin embargo, García ha sido enfática al aseverar que no depondrá la huelga de hambre hasta que su marido no esté de regreso en su casa en Matanzas. “Estaré así el tiempo que sea necesario”, ha expresado.
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