Las familias riojanas trasladan al consejero su “incertidumbre” ante el nuevo curso

Las familias riojanas han trasladado este miércoles al consejero de Educación, Pedro Uruñuela, su “incertidumbre” ante el inicio del curso escolar en la actual situación sanitaria derivada de la pandemia de coronavirus.

En una reunión mantenida por representantes de Fapa Rioja con Uruñuela, el subdirector de Gestión Educativa, Emilio Izquierdo y el subdirector de Innovación Educativa, Alberto Abad, se han expuesto estas dudas sobre la gestión de la vuelta a clase.

Según han transmitido desde la federación de AMPAs, desde la Consejería se ha trasladado que la base del proceso será el Plan de Contingencia y los protocolos y medidas que se vayan adoptando desde Salud. Los centros “deberán acomodarse a la realidad que tengan, preparando sus propios planes y solicitando profesores de apoyo a la Comunidad”, han explicado desde FAPA al término del encuentro.

Cada centro informará a las familias de los planes previstos de prevención, horarios de entrada, recreos, pautas y normas sanitarias, si bien desde Educación se ha trasladado que al comienzo del curso se desarrollará una formación inicial en materia de salud para menores y familias, así como una formación digital donde se podrá conocer de qué medios se dispone en cada caso.

Con respecto a los posibles casos de coronavirus que pueda surgir, en el encuentro se ha informado de que será Salud la encargada de fijar qué personas deben hacer la cuarentena o realizarse pruebas PCR en función del conatcto mantenido.

Otra de las cuestiones en las que ha insistido la Consejería es en que se buscará que los grupos tengan entre sí el menor contacto posible y en que se buscarán espacios alternativos en los distintos municipios por si fueran necesarios, favoreciendo las salidas al exterior del alumnado.

La prioridad continúa siendo la educación presencial y habrá también un protocolo para el transporte escolar.

Desde FAPA Rioja se ha insistido en la conciliación, especialmente en el supuesto de que algún aula o centro deba cerrar temporalmente por un brote pero, según ha detallado el colectivo, se abordará con otras consejerías con competencias en el ámbito laboral.

Ambas partes se han emplazado a un nuevo encuentro al inicio del curso, que FAPA Rioja augura “de nuevo complicado y con situaciones distintas en cada localidad según la realidad sanitaria”.

El colectivo ha reclamado a las AMPAs que se creen “cauces de contacto” con todas las familias de cada centro para mantener “una información fluida y veraz” y también ha pedido “apoyo a los equipos directivos, que deben reorganizar sus centros educativos para que sean lo más seguros posibles”.

.Y por último ha insistido en estar “cerca de las familias para poder solucionar los problemas que vayan surgiendo y que todos los menores tengan las mismas oportunidades”.