Los logroñeses vuelven a cumplir con el 'voto' de San Bernabé en la ofrenda del pez

Los logroñeses, más madrugadores que nunca, volvieron a cumplir, esta mañana, con el 'voto' de San Bernabé en la ofrenda del pan, el pez y el vino; alimentos símbolo de la ciudad cercada por los franceses en 1521. En esta ocasión, la Cofradía del Pez repartió 24.000 raciones según indicó la secretaria de la Cofradía, Maria Díez del Corral.

Desde las 9.45 horas de la mañana, un cuarto de hora antes de lo anunciado, los miembros de la cofradía comenzaron a repartir las raciones, elaboradas bajo la supervisión del cocinero Lorenzo Cañas. El buen tiempo, aunque algo caluroso conforme avanzaba la mañana, acompañó a los asistentes.

Díez del Corral explicó que se iban a servir 900 kilogramos, lo que hacen unas 24.000 raciones. Los peces se acompañan de sus correspondientes panecillos y una jarrita de vino, si bien la jarrita cuesta un euro, aunque también se sirve vino de manera gratuita en vasos de plástico. En esta ocasión está previsto que se sirvan 1.000 litros de vino.

35 bombonas de butano calentarán las 6 “perolas con capacidad para 25 litros de aceite hirviendo”, donde se fríen las truchas. Se estima que se usarán 300 litros de aceite de oliva virgen extra, afirmó la secretaria de la Cofradía.

Los peces elegidos fueron truchas de Bobadilla ya que, desde hace varios años, la cofradía ha abandonado su costumbre de pescar en el Ebro ya que en su momento realizaron unos análisis y los peces no reunían la condiciones fitosanitarias. A ello se une la escasez de peces en el río logroñés para poder atender la demanda.

A las 09.30 se hace la bendición de los peces, momento que se encienden las primeras cazuelas. En cuanto están las primeras raciones se comienzan a servir, ya que además desde primera hora de la mañana la gente comienza a hacer filas. De todos modos “la vorágine llega más tarde, cuando aparece la procesión de San Bernabé”, dijo Díez del Corral.

La Cofradía del Pez estaba formada en junio por unos 37 cofrades, de los que 25 son de número, a los que se unen otros 2 eméritos (aquellos que siendo de número cede su plaza para que forme parte de la institución otra persona), y 10 honorarios. Además para el reparto cuentan con la colaboración de un centenar de voluntarios, traídos por cada uno de los cofrades.

En la Cofradía logroñesa solo puede haber 26 cofrades de número (número formado por el 11 del 6 de 1521; día en que tuvo fin el asedio). Es la primera vez que la entidad cuenta con una mujer, precisamente su secretaria, Maria Díez del Corral, de 28 años, que lleva años colaborando “en el reparto” de los panes y los peces, aunque este año, dijo, estar “más contenta, porque lo vives todo desde dentro”.