Rajoy, entre Ana Mato y Soraya Sáenz de Santamaría

El número dos de la lista de Mariano Rajoy será Ana Mato o Soraya Sáenz de Santamaría en opinión de varios dirigentes del Partido Popular cuando hablan de unas candidaturas sobre las que no hay muchas más certezas, por no decir ninguna.

Una de las características fundamentales del presidente del PP, recuerda un dirigente territorial que presume de conocerle bien, es la discreción con la que aborda las cuestiones internas que más directamente dependen de él, como por ejemplo el segundo puesto en la lista que él encabezará o la identidad de los que serán sus ministros si gana las elecciones.

Rajoy “no suelta prenda” nunca, ni siquiera al personal de su gabinete, y si algo cuenta es difícil que trascienda, pues conocen la personalidad del líder del partido y lo poco que le gusta que algunas decisiones suyas aparezcan en la prensa antes del plazo que sólo él se ha marcado.

Pero entre toda esa opacidad se puede atrapar alguna información, como que Pío García-Escudero, recalcan en su entorno, tiene muchas posibilidades de repetir en el Senado o que Rajoy no fichará en esta ocasión a un número dos de renombre no ligado al partido, como fue Manuel Pizarro en 2008.

Para estas elecciones, Rajoy, aseguran varios altos cargos consultados, tiene claro que contará con una mujer del partido. Todos apuntan a Ana Mato o a Soraya Sáenz de Santamaría. De la primera las fuentes subrayan que desde los éxitos de las elecciones europeas y catalanas el presidente le ha ido dando un protagonismo creciente: ahora es la directora de la campaña electoral.

Sus cualidades son que conoce el partido al detalle y que sabe coordinar a la perfección a los altos cuadros autonómicos para trasladar un mismo mensaje. De la portavoz del grupo parlamentario elogian su capacidad de trabajo y la eficacia, aparte de que ha sabido ganarse completamente la confianza, no sólo de Rajoy, que ya tenía, sino de la mayoría de la bancada popular.

El nombre del número dos de la lista de Rajoy se mantiene, por tanto, como una de las incógnitas de unas candidaturas que el Comité Electoral Nacional empezará a analizar la semana que viene. Fuentes del PP han remarcado a Efe que probablemente entre finales de mes y primeros de octubre se darán a conocer los nombres de

los que se erigirán en cabezas de lista.

Añaden que tras la Convención de Málaga de los días 6, 7 y 8 de octubre el Comité Electoral procederá a completar las listas, siempre a partir de las propuestas que le remitan los órganos autonómicos correspondientes. Las candidaturas del Partido Popular no depararán sorpresas llamativas, así que se caracterizarán por ser “más de lo mismo”, en palabras de un alto cargo de la organización.

El único número uno confirmado es el del diputado Jorge Fernández Díaz por Barcelona, pues así lo adelantó el propio Rajoy durante la visita a la capital catalana el jueves pasado. La discusión sobre quiénes integrarán las listas está revuelta en Valencia, Asturias y Navarra.

Tras el paso ambiguo de la alcaldesa Rita Barberá, quien hace una semana ni confirmó ni desmintió que pudiera encabezar la candidatura, las aguas poco a poco están volviendo a su cauce y las fuentes consultadas creen que al final no se postulará, lo que deja el camino libre a quien se vislumbraba como número uno, el vicesecretario Esteban González Pons.

Ahora bien, la dirección comienza a preocuparse ante lo que puede ser una batalla enconada por la composición de las listas, sobre todo por el encaje que en ellas puedan tener cargos muy ligados a Francisco Camps.

En Navarra la coalición con UPN no ha sentado bien a todos y hay quien, como puntualiza una fuente de la Ejecutiva del PP, comienza a percibir grietas en el liderazgo de Santiago Cervera.

La inquietud con el partido en Asturias procede de los pobres pronósticos de intención de voto, así como de las fracturas internas que no se cierran. El “efecto Cascos” sigue haciendo mucho daño al PP, reconoce una fuente.