Siete detenidos y siete heridos leves en los enfrentamientos en Tirso de Molina

Los incidentes registrados ayer por la tarde en los alrededores de Tirso de Molina y el barrio de La Latina, donde decenas de antidisturbios del Cuerpo Nacional de la Policía (CNP) cargaron con pelotas de goma y gases lacrimógenos contra más de dos centenares de antifascistas y neonazis se saldaron con siete heridos leves, cuatro de ellos agentes de la Policía Nacional, según informaron fuentes de Emergencias Madrid.

Asimismo, la Policía detuvo a siete personas, entre ellos dos menores, simpatizantes de los movimientos antisistema, por destrozos en el mobiliario urbano. Seis de ellos fueron detenidos en la Ribera de Curtidores y el otro en la calle Argumosa. Los cincos adultos permanecen a estas horas en la Brigada Provincial de Información a la espera de que se les tome declaración, mientras que los dos menores han quedado bajo la custodia del Grupo de Menores (GRUME), según informó a Europa Press un portavoz de la Jefatura Superior de Policía.

Los sanitarios del Samur atendieron a siete heridos de carácter leve o muy leve, la mayoría de ellos por contusiones, que no precisaron traslado hospitalario, por lo que fueron dados de alta en el mismo lugar.

Al lugar de los hechos, se trasladaron siete dotaciones de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid y seis unidades del Samur Protección Civil, de las que tres intervinieron en primera línea y las otras tres quedaron en preventivo en la plaza de Jacinto Benavente.

Los Bomberos tuvieron que extinguir multitud de focos de fuego intencionados, la mayoría en contenedores, cubos de basura y papeleras, que en muchos casos habían sido utilizadas a modo de barricadas. Al menos siete vehículos resultaron dañados, tres de ellos afectados por fuego y el resto roturas de lunas y retrovisores. Al igual que con los contenedores, los manifestantes movieron algunos de los vehículos para cortar las calles.

Asimismo, los violentos lanzaron objetos contundentes, entre los que se encontraban botellas, adoquines y piedras, contra un camión de bomberos, aunque no hubo que lamentar daños personales.