Vuelta triunfal de Titi
Un respiro, la victoria. Una mirada al pasado, el regreso de Titi. Dos elementos claves para comprender los tres puntos que ha sumado la UD Logroñés ante un Toledo estéril en ataque. Onésimo hablaba de falta de lucidez de los suyos; algo de mérito habrá tenido el conjunto de Rafa Berges para frenar a un conjunto, cierto que pese a su clasificación cuenta con pocos goles en su casillero. que apenas inquietó a Miguel. Sin errores defensivos, el bloque riojano demostró en horario matinal que está capacitado para ganar.
Quizá el acierto venga las aportaciones de los nuevos. Sin Thaylor, Chevi ni Mendi ya en las filas blanquirrojas y a la espera de un '9', de esos que dicen de verdad, Titi y César Remón dan lustre a una UDL que se aplica en el trabajo, que mantiene el orden, que acecha en las acciones a balón parado y que quiere aspirar a algo más que salvar la categoría. Si el centrocampista logroñés da jeraraquía y mando, el asturiano, en su vuelta a Las Gaunas, le dio aire fresco, más profundidad por el costado, otra alternativa con espacios.
No en vano, en poco más de media hora, Titi tuvo tiempo de perdonar un uno contra uno, de asistir para que algún compañero la empujara a la red y para desequilibrar un partido áspero, poco brillante pero sí intenso más por la tensión y emoción que por el juego, limitado y entrecortado por las constantes interrupciones. Aspecto al que ayudó una acción discutida por la parroquia local -que también mostró su disgusto por la decisiones tomadas por el Consejo Regulador en cuanto a su publicidad- antes de alcanzar los treinta minutos.
Juanfran, nueva oportunidad para reivindicarse como referente ofensivo, hizo un buen desmarque y recogió la bola, se escapaba dirección a portería cuando Adrián le zancadilleó siendo la única oposición antes de Alcolea. Falta fuera del área y roja. Sin dudar. Hasta que el asistente obligó al colegiado a dar marcha atrás en su decisión porque la jugada quedaba invalidada por fuera de juego del delantero blanquirrojo. A partir de ese momento, el árbitro optó por pitar todo lo que vio. Cuestión que perjudicó a la viveza del ritmo.
POCO RITMO Y SIN CONTINUIDAD
De hecho, si por algo se caracterizó el duelo fue por la ausencia de oportunidades. El Toledo, en ataque, estuvo difuso, demasiado. Cuando tenía el cuero, lo amasaba sin profundidad ni verticalidad, mientras que cuando era la UDL la que domina los tiempos trataba de culminar merced a los diferentes acciones a balón parado. Porque el peligro era constante. Una falta lateral, un saque de esquina. La amenaza era real aunque en ocasiones eran más las ganas por marcar que los remates, imprecisos cuando los hubo.
Los de Onésimo aguantaban. Les costaba hilvanar varias acciones consecutivas, pero esto es Segunda B. Hay que saber adaptarse. Por eso, el cuadro manchego varió su discurso durante la segunda mitad. Dio un paso adelante variando su sistema, para dejar tres centrales y dos carrileros. Quería intimidar a su rival, meter a los locales en su campo. Lo consiguió por momentos, pero sin que el capitán logroñés tuviera que emplearse a fondo.
Rafa Berges se quiso dar prisa, respecto a lo que venía siendo habitual, para introducir una sustitución. Espina, que no atraviesa por su mejor momento de juego como blanquirrojo, cedía su lugar a Titi, al hijo pródigo, al que se marchó porque quería un clima más caluroso y ha vuelto después de que el Murcia no le considerara un jugador 'top'. Ha sabido rectificar a tiempo para ser protagonista en el día de su segundo debut. Como si no hubieran pasado los meses, la UDL encontró una zona por la que atacar, balones a la derecha.
Allí irrumpía Titi con desborde y finura para fallar ante Alcolea y después para dar un gol hecho al que ningún compañero pudo llegar. Eran pequeños golpes, muestras de que el control del Toledo se podía romper en cualquier momento. Dicho y hecho. Con Marcos André ya sobre el césped, el brasileño pugnó por una pelota y el balón salía hacia la derecha. Por ahí estaba Titi, dentro del área, para superar la salida de Alcolea.
La UDL había hecho lo difícil, marcar. Restaban casi veinte minutos para que los fantasmas no aparecieran. La UDL supo jugar con el marcador a favor, dejó hacer a un Toledo improductivo en ataque gracias al buen trabajo de un cuadro local seguro de lo que hacía, consciente de la importancia de lograr los tres puntos y que no se amilanó pese a los intentos de los visitantes por equilibrar el marcador. Salvador daba el relevo a Muneta y el bloque ganó en piernas, aunque menos en posesión. Dio igual porque el 1-0 era una realidad.
FICHA TÉCNICA
UD Logroñés: Miguel; Luca Ferrone, Caneda, Pazó, Paredes; Muneta (Salvador, min. 82), César Remón, Adrián León, Reguilón; Espina (Titi, min. 58) y Juanfran (Marcos André, min. 67).
Toledo: Alcolea; Expósito, Echaide, Adrián, Toni Sánchez; Barranco, De Lerma; Lolo Plá, Pablo González (Owusu, min. 78), Canario (Jordan, min. 78); y Roberto (Dani Pérez, min. 46).
Gol: 1-0, min. 73: Titi.
Árbitro: Daniel Palencia Caballero (Comité Vasco). Amonestó a los locales Paredes (min. 17), Reguilón (min. 28) y César Remón (min. 41) y a los visitantes De Lerma (min. 19), Barranco (min. 33) y Echaide (min. 62).
Incidencias: 2.202 espectadores en Las Gaunas, según informó el club organizador.
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