La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha asegurado que hay una “campaña mezquina” contra la sanidad de Madrid para “eclipsar” las huelgas de profesionales sanitarios contra el Gobierno por el Estatuto Marco. La dirigente madrileña también ha acusado de “alarmar” con el Hospital de Torrejón, un centro público que gestiona la empresa Ribera Salud, envuelto en un escándalo tras los audios en los que el CEO del grupo instaba a rechazar pacientes o prácticas no rentables.
El sábado la líder de la Comunidad de Madrid ya dijo que todo era una exageración de Moncloa y rebajó la crisis a “trifulcas entre directivos”. A esa estrategia se ha sumado la consejera de Sanidad, Fátima Matute, que ha criticado los “intereses deleznables” de la izquierda y espera que la empresa gestora dé las explicaciones oportunas en la reunión que mantendrá este martes.
En una entrevista en esRadio, la consejera ha dicho que la conversación del CEO de Ribera Salud está “sesgada” y que habría que escucharla entera, si bien ha insistido en que el fragmento que se ha conocido es “inaceptable”: “Yo estoy de acuerdo en que hayan retirado a este CEO de sus funciones hasta que todo se aclare”. También ha sacado pecho de las cifras de listas de espera del hospital.
Y ha apuntado al “interés que hay de tapar todos los escándalos” que rodean al Gobierno “entre la corrupción, los puteros, las sobrinas, los sobones y los hermanos”. “Es que es todo un disparate y entonces intentan hacer un 'casus belli' de algo que a mí me parece lo más preciado, como digo, que es la sanidad”, ha reprochado. Así, Matute ha dicho que se están “dando noticias falsas de material reutilizado, de restos, cosas que parece que estamos en Ruanda” porque son “viles, mezquinos”. “Hay una huelga mañana, a lo mejor es lo que quiere tapar [Mónica García]”, ha afirmado.
Los audios en los que el jefe de Ribera Salud apretaba a ejecutivos para que antepusieran el beneficio económico a la salud de los ciudadanos en el hospital de Torrejón son el remate de una estrategia de ahorro de costes en este centro hospitalario de la que ya había habido numerosas señales de alarma y que fueron denunciadas por los propios trabajadores y por sindicatos. Un documento interno alertó de que la dirección elegía pacientes por “rentabilidad económica”. Fuentes del hospital detallan que lo que hacía la dirección era priorizar en cirugías y consultas a la gente que venía de fuera de Torrejón: a igualdad de patologías, a igualdad de gravedad, entraba antes un paciente de otra área sanitaria. La explicación a esta práctica es que el hospital recibe un dinero extra por parte del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso por cada paciente externo, que se suma al montante anual presupuestado.
Además, dirección del Hospital Universitario de Torrejón modificó el funcionamiento de las Urgencias para que se atendiera antes a los pacientes leves, que se evitara subir a enfermos a las plantas de medicina interna y llegó a dar órdenes verbales para que los pacientes graves fueran reasignados como leves y se les atendiera con rapidez pero sin los “mínimos de calidad y seguridad”. Así lo recoge un documento elaborado por el personal de Enfermería en abril de este año, al que ha accedido elDiario.es. La dirección se saltó las bases del triaje en Urgencias –el sistema que clasifica pacientes por colores en función de su gravedad y el tiempo en que deberían ser atendidos– para priorizar a los leves y así aligerar los tiempos de espera y evitar reclamaciones e insatisfacción entre los enfermos.