Los juzgados de Plaza de Castilla se quedan sin agua durante horas
Los juzgados de Plaza de Castilla han estado sin agua durante la mayor parte de esta mañana. El suministro se cortó de madrugada y los más de 1.000 trabajadores del edificio se han encontrado al llegar a la sede que los grifos no funcionaban y tampoco se podían utilizar los baños en un día de la semana que concentra muchos juicios.
La avería se ha producido al dejar de funcionar una bomba de agua. Se ha dado aviso a los servicios de la Comunidad de Madrid, que han reestablecido el suministro alrededor de las 12 horas, según confirman desde la Consejería de Presidencia.
El sindicato CSIF enmarca lo ocurrido dentro de un panorama general de “mal estado de las instalaciones” que ha sido denunciado reiteradamente por los sindicatos y también por los propios jueces decanos. “Las infraestructuras están como están. Hay tres bombas en el edificio y dos ya no estaban funcionando. Y esta tercera se ha estropeado”, explican desde CSIF.
En febrero del año pasado se desplomó de madrugada un falso techo en la misma sede. Los sindicatos señalaron entonces que el incidente se había procucido al acumularse el agua debido a que no se limpian las cañerías descascarilladas y los conductos del aire acondicionado. La Comunidad de Madrid explicó después que los operarios, en un proceso de revisión de esos conductos, habían dejado “mal colocadas” las placas del falso techo.
El corte ha afectado a cuatro horas de funcionamiento operativo del edificio, tanto a los funcionarios como a las personas que acudían a los juicios programados para la mañana de este martes.
También se han producido problemas de suministro en los juzgados del municipio de Aranjuez, que estuvo una semana sin agua a finales de septiembre. Allí se desplomó también parte de un techo en junio.
La Comunidad de Madrid anunció en febrero un plan de choque para las infraestructuras judiciales tras el incendio registrado en el Juzgado de Violencia contra la Mujer y Primera Instancia número 5 de Torrejón de Ardoz. No saltaron las alarmas y no se pudo usar la salida de emergencia, informó El País.
El fuego se produjo por un cortocircuito en una máquina de climatización que provocó el cierre posterior de la sede judicial porque los trabajadores acusaban dolor de cabeza y escozor en los ojos. Entonces, el consejero de Presidencia, Ángel Garrido, se comprometió a invertir 1,7 millones de euros en los siguientes seis meses para mejorar la seguridad, la climatización y los planes de emergencia, entre otras cosas.