Miembros del Gobierno de Madrid tratan de convencer a Ayuso de que prohíba las reuniones en domicilios y restrinja más la hostelería

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, tiene que decidir en las próximas horas si aprueba medidas más restrictivas para frenar el avance de la Covid-19 en la región, que tiene ya con una incidencia acumulada de 827 casos por cada 100.000 habitantes a 14 días, el triple de lo considerado como “muy grave”. Miembros del Gobierno regional reconocen a elDiario.es que “están muy preocupados” por la evolución de la pandemia, que como apuntaban ya hace una semana los expertos consultados por esta redacción “se está pareciendo más a la primera ola que a la segunda”.

Entre las nuevas medidas que la Consejería de Sanidad están la de solicitar que se adelante el toque de queda (como ya han pedido el resto de comunidades), prohibir las reuniones de no convivientes en domicilios y más restricciones en la hostelería. La última palabra la tiene, no obstante y como siempre, la presidenta Isabel Díaz Ayuso –contraria a este tipo de medidas– a la que en estos momentos tratan de convencer desde Sanidad de que estas medidas “son necesarias y urgentes”. La rueda de prensa en la que se anunciarán las medidas se ha retrasado por más de una hora. “A partir de las 18 horas”, indican ahora desde el departamento de comunicación.

En las últimas 24 horas han ingresado en los los hospitales de Madrid 632 nuevos pacientes por coronavirus. Otros 71 lo han hecho en las UCI, que ya se encuentran de nuevo al borde del abismo con su capacidad al 129%, y 63 personas han fallecido: la cifra más alta de esta tercera ola. Una situación que mantiene en alerta a los sanitarios desde hace más de una semana y que ahora preocupa “mucho” también a los técnicos de la Consejería puede empeorar exponencialmente los próximos días.

El Gobierno de la Comunidad de Madrid que preside Ayuso está enclaustrado desde primera hora de este viernes en una reunión en la vivienda dependiente del Canal de Isabel II en la localidad madrileña de Manzanares el Real. Entre otros asuntos, aseguran varias fuentes consultadas, se están tratando los presupuestos de 2021 que siguen encallados por las negociaciones entre los socios de Gobierno, PP y Ciudadanos, que no logran encontrar posturas encontradas. Pero además, sobre la mesa también están las nuevas medidas restrictivas para hacer frente a la Covid-19 con los hospitales al borde del abismo que se anunciarán esta tarde.

De hecho, la rueda de prensa de cada viernes en la que se informa de las nuevas medidas se ha retrasado a la tarde para “tener margen” para “convencer a la presidenta”. Encima de la mesa hay medidas como prohibir las reuniones sociales en domicilios o adelantar el toque de queda –aunque esta última sigue dependiendo del Gobierno central–. También plantean el cierre al menos del interior de la hostelería. En Sanidad son conscientes de la dificultad de que la presidenta madrileña ceda en estas medidas.

Ayuso se mostró contraria esta semana a adelantar el toque de queda. “Para arruinar aún más a la hostelería en España conmigo que no cuenten”, declaró la dirigente del PP. “Las administraciones tenemos que poner todas las medidas necesarias para seguir conjugando la salud y la vida con el empleo. Es muy fácil cerrar negocios, mandar a la gente a casa, pero luego recuperarlos es imposible. Y la hostelería, los comercios y la actividad está ya muy mermada desde el mes de marzo del año pasado”, ha defendido. “Si seguimos aplicando estas medidas, a lo mejor los políticos tendremos más seguridad, pero ellos no”.

En la Consejería de Sanidad no lo ven de la misma manera y este miércoles se sumaron a la petición del resto de comunidades autónomas que pedían adelantar el toque de queda. La preocupación es “mayúscula”, reconocen, con una incidencia acumulada en la región que alcanzaba este jueves los 875 casos por cada 100.000 habitantes a 14 días. También escandaliza el estado de los hospitales que ya tienen ingresados por Covid-19 a 3.721 y 608 pacientes en intensivos.