Las derrotas y victorias de Daniel Bernabé
Dice Daniel Bernabé que su primer libro, 'De Derrotas y Victorias', está compuesto por un conjunto de relatos -23 para ser exactos- independientes entre sí. Sin embargo, cuando le hacemos notar que parece que es un mismo narrador el que protagoniza todas las historias no lo rebate. “Me lo han dicho otras veces. Es posible”. Una única voz treintañera, urbanita y malasañera, íntegra, melancólica y realista, planea sobre este volumen iniciático, editado por Endymion, y cargado de verosimilitud y sinceridad: narraciones de amor-desamor y de vida cotidiana impregnan unos renglones que atrapan con facilidad al lector, haciéndole deambular por una serie de lugares comunes (sentimentales, laborales, domésticos, geográficos...)
“El libro lo componen relatos escritos a lo largo de año y pico, entre 2010 y principios de 2011, que están formados por trozos de mi blog. No había intención de editarlos, pero surgió la oportunidad de hacerlo y aquí estamos, presentándolo de aquí para allá y obteniendo una muy buena acogida que, de hecho, hará que se reedite”, indica el autor, que vive desde hace un par de años en el barrio, cumpliendo por fin una ilusión surgida desde que allá por 1997 comenzó a pisar de forma habitual nuestras calles.
Amor-desamor
Amor-desamor
-En el libro hay mucho sufrimiento amoroso...
-“Veo mucho escepticismo en autores literarios nuevos y en la sociedad en general. No comparto esa corriente. Mis historias están construidas con cosas que conozco, con fragmentos de realidad. Me gusta que lo que se escriba sea creíble, tanto como lector como autor, para tratar de transmitir emociones de ese modo. Y sí, en la vida hay cosas que duelen y que no hay que ocultar.
Desempleo
Desempleo
-Para cosas creíbles, el mundo laboral en el que se desenvuelven los distintos personajes
-Mis personajes tienen trabajos normales, como la inmensa mayoría de los lectores. El trabajo es importante en nuestras vidas y nos quita mucho tiempo. Influye en nuestro estado de ánimo y puede llegar a ser un personaje en sí mismo con el que interactuamos. Puede que a lo largo de los distintos relatos se perciba cierto odio de clase, consecuencia de que los personajes se sienten minusvalorados en sus trabajos, al tiempo que son muy conscientes de lo que les pasa. Yo mismo estoy ahora en paro, después de que cerrara la librería en la que trabajaba y mi prioridad, más allá de seguir o no escribiendo, pasa por encontrar un sustento económico. Mis proyectos como escritos están supeditados a este objetivo.
Realismo melancólico
Realismo melancólico
-En tus historias hay frecuentes referencias a épocas y personajes pasados. Muchos de los personajes viven pensando en relaciones anteriores. Tú mismo eres mod. ¿Te sientes cómodo mirando hacia atrás?
-La actualidad y el presente me resultan poco atractivos, pero no puedes vivir en el pasado, no te lleva a ninguna parte. Lo que sí que resulta útil es buscar referentes en el pasado que creas brillantes. Ahí admito la melancolía. Sobre todo encuentro que antes había gente que se creía lo que hacía, eso me atrae. Antes había un romanticismo que hoy no percibo. No hay un compromiso con lo que te gusta. Hoy todo es tendencia. En Malasaña hay cada vez más tendencia, cosas que se pasan“.
Referencias culturales
Referencias culturales
-Apuntabas antes que has trabajado como librero. ¿Es por deformación profesional de quien está acostumbrado a aconsejar a los clientes por lo que 'De Derrotas y Victorias' está lleno de referencias culturales de todo tipo... literatura, música, cine e, incluso, estéticas?
-Está claro que se te cuelan cosas personales. Puede ser un fallo, pero también es una forma de decir 'este es mi mundo'; estos son mis referentes, mi vida y me siento cómodo con ello. Me gusta mucho todo lo que suene a contracultura. Luego, yo soy mod, me gusta la música de los 60, los trajes estrechos de tres botones, los zapatos brillantes con grandes hebillas.
-Aprovechemos entonces el hecho de que seas una persona culturalmente activa para que nos recomiendes un libro, un grupo de música, una película y algo sobre moda...
-'Knockemstiff', de Donald Ray Polo, un libro de relatos; la música de los Kniks; la filmografía de Werner Herzog y la estética mod.
Malasaña
Malasaña
-Los relatos que componen el libro han surgido en Malasaña. En algunos, citas explícitamente el nombre de alguna calle (Cuando giraba por la calle más honrada de Madrid, Desengaño) e, incluso, dejas que afloren ciertas críticas. ¿Cómo ves el Daniel Bernabé vecino el barrio?
- Siento que el barrio es cada vez más un escaparate. No es una crítica, sino la constatación de un hecho. Cada vez quedan menos bares de los de toda la vida y menos tipos auténticos. Es cierto que en los ochenta había una parte muy dura, toda la relacionada con las drogas y cosas así, pero también se percibía un compromiso romántico con lo que a cada uno le gustaba. Por otra parte, tiene que haber algo más que tiendas de chinos, sin que tenga nada en contra de ellos, y tiendas de moda. A veces es difícil conseguir cosas básicas por la desaparición de los comercios tradicionales. Creo que no todo lo actual es bueno ni positivo. Antes había cosas que estaban bien.
15-M
15-M
-Por último, y volviendo una vez más a ceñirnos los personajes que protagonizan los relatos de tu libro, ¿no te parece que siendo muy conscientes de las cosas que les están sucediendo y del entorno social en el que viven son algo apáticos, como que tienen falta de esperanza? Escribiste las historias antes de que surgiera el movimiento de los indignados pero, ¿crees que podríamos encontrar hoy en día a alguna de tus criaturas participando en una de las asambleas barriales del 15-M?
-En primer lugar, decir que yo encuentro a los protagonistas de mis historias tan pasivos. Muchos de ellos realizan ciertas acciones de rebeldía que podemos considerar como pequeños triunfos. Sobre lo del 15-M, la verdad es que no lo había pensado, pero pudiera ser. No están contentos con la realidad en la que se desenvuelven así que, quién sabe.
- En el barrio, 'De Derrotas y Victorias' puede encontrarse en la librería Tres Rosas Amarillas, San Vicente Ferrer 34.
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