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Tour por el Madrid más afectado por las políticas sanitarias de Ayuso: “Hace falta inversión, no medidas parche y promesas incumplidas”

Médicos de familia y pediatras se concentran en el centro de salud general Fanjul.

Fátima Caballero

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“Estamos fuertes; es ahora o nunca”, dice María Justicia, pediatra de Atención Primaria en Madrid. La frase la repiten decenas de médicos en cada centro de salud en el que para el autobús que este jueves recorre los puntos más afectados por la política sanitaria de la Comunidad de Madrid, ahora con Isabel Díaz Ayuso al frente, pero antes con los sucesivos gobiernos del Partido Popular tras dos décadas en el poder. Los sanitarios dijeron ayer basta a un plan de la Consejería de Sanidad que no se creen. Arrastran en las espaldas demasiadas “promesas incumplidas” y saben que la solución para la Atención Primaria pasa por más inversión, algo que desde el Gobierno de Ayuso no quieren ni oír hablar, aseguran.

La primera parada de este 'tour' sanitario es en el centro de salud Palma norte, en pleno corazón de Madrid. Un lugar en el que los sanitarios no solo trabajan con largas agendas, sobrecarga de trabajo y poco tiempo para dedicar a sus pacientes. Allí también tienen que lidiar con humedades en dos pequeños locales “muy deteriorados”.

“Hace falta dinero tanto para contratar más médicos como para arreglar muchos centros de salud que están en la insalubridad. Nos dicen que estamos en la comunidad más rica, pero la atención acaba siendo muy deficitaria”, lamenta Javier Torres, médico de familia en el centro de salud Palma Norte desde hace once años. “Tendríamos que haber ido a huelga muchísimo antes. Si ahora conseguimos que deje de haber ese maltrato sistemático al que nos someten, habrá valido la pena”.

Este miércoles el comité de huelga se levantaba de la mesa de negociación con la Consejería de Sanidad. Piden un interlocutor válido y más personal para poder lidiar con la larga lista de pacientes y la sobrecarga asistencial. “Ayer presentaron un plan basado exclusivamente en que voluntariamente nosotros decidamos hacer más horas extras. Nos dicen que nos garantizarán 34 pacientes por agenda, pero para atender al resto nos piden que hagamos horas extra cuando acabe nuestra jornada porque no están dispuestos a contratar a más médicos”, lamenta Amparo Naranjo del centro de salud de Monterrosas.

En cada parada, se repiten las misas proclamas: “¡Lasquetty, escucha, la primaria está en lucha!”, “somos la voz de los pacientes”, “queremos atender y no despachar”. Han tardado en plantarse y ahora no están dispuestos a parar si las promesas no vienen acompañadas de más dinero. Para ello se dirigen al consejero de Economía y Hacienda, Javier Fernández-Lasquetty, un viejo conocido de la Marea Blanca, que tuvo que dimitir como consejero de Sanidad de Esperanza Aguirre tras fracasar sus planes de privatización de la sanidad.

El 'no' de los médicos este miércoles pilló por sorpresa al Gobierno regional. Hasta ahora habían sorteado las protestas y las huelgas con planes que luego quedaban en un cajón y no se cumplían: “Hay acuerdos del 2006, del 2018 y del 2020 incumplidos”, recuerda Naranjo. Los sanitarios avisan de que en esta ocasión no van a parar hasta que las promesas no tengan un mínimo de garantías y eso para por más presupuesto.

“Solo quieren tapar parches y no ofrecen condiciones atractivas para que vengan médicos de familia y pediatras”, lamenta Justicia que cifra en un millón de madrileños los que no tienen asignado médico. “Me duele que la Comunidad de Madrid entre 2019 y 2022 ha perdido 200 pediatras”.

Otra de las paradas ha sido en el centro de salud general Fanjul, en el barrio de Aluche. Allí Dora Bejarano, pediatra de Atención Primaria atiende ella sola tres agendas, unos 70 niños por jornada. “Hace un año ya hablé de que en este centro de salud la pediatría estaba en precario porque había una plaza sin cubrir de las tres existentes. Un año después, tras toda la inversión que nos dicen que se ha hecho, en este centro de salud hay dos plazas descubiertas y estoy yo como única pediatra”, incide Bejarano. “Trabajo a destajo”, lamenta.

La “lucha” va a continuar, advierten. Saben que los presupuestos para 2023 están en elaboración y que es el momento de que el Gobierno de Ayuso ponga sobre la mesa los millones necesarios para “salvar la Atención Primaria”. “Somos conscientes que no todo se puede cambiar de la noche a la mañana, pero sí asentar las bases del cambio y eso pasa por financiación, no se puede seguir gestionando a base de la miseria”.

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