Alfa Romeo ha dado a conocer los detalles con los que renueva sus modelos Stelvio y Giulia a fin de mantener y mejorar sus cifras de ventas. El año pasado matriculó alrededor de 1.800 unidades del SUV y unas 200 de la berlina, mientras que los otros 1.000 vehículos que entregó correspondieron al Tonale, un SUV de tamaño más pequeño, incorporado a la gama a partir del mes de junio.
El principal cambio que reciben los Giulia y Stelvio consiste en unos nuevos grupos ópticos delanteros equipados con faros “3+3” -un símbolo de la marca italiana- y focos Full Led Matrix adaptativos. Gracias a aquellos se establece un fuerte lazo de familia con el Tonale y, al mismo tiempo, con modelos icónicos de la firma milanesa como el SZ Zagato y el concept Alfa Romeo Proteo.
En el frontal, los diseñadores han retocado también las rejillas delanteras, donde se sitúa el logotipo, y las dos tomas de aire principales situadas en la parte inferior, en un trabajo de reinterpretación contemporánea del conocido Trilobo.
Los tres módulos de los faros conforman una línea frontal única y proporcionan tanto luz de conducción diurna como intermitentes dinámicos. Disponen de dos tecnologías destacables en lo que respecta a garantizar las mejores condiciones de iluminación: el Adaptive Front Lighting System, que ofrece un ajuste continuo de las luces de cruce en función de la velocidad y de las condiciones específicas de conducción, y la Glare-Free High Beam Segmented Technology, que, cuando hay baja visibilidad, detecta automáticamente el tráfico delantero y/o en sentido contrario para evitar deslumbrar a otros coches.
Igualmente, las ópticas traseras se renuevan para acentuar el alma deportiva de ambos modelos. En concreto, el Stelvio lleva ahora unos pilotos con cristal ahumado y acabado negro brillante, mientras que los del Giulia adoptan cristal y acabado transparente.
En el interior, la novedad más notable se encuentra en el centro del cuadro de instrumentos, caracterizado por su tradicional diseño telescópico -los famosos cannocchiale- y donde destaca la nueva pantalla TFT de 12,3 pulgadas, totalmente digital, desde la que se puede acceder a toda la información del coche y a los sistemas de ayuda a la conducción.
El panel puede configurarse mediante tres disposiciones: Evolved, que representa la visión de diseño de los Alfa del futuro realzando la zona central de la pantalla y conservando los dos diales laterales; Relax, más pensado para el confort y libre por tanto de información detallada, con lo que se eliminan los diales complementarios, y Heritage, que se inspira en los modelos históricos de la marca de los años 60 y 70, e incluye detalles distintivos como los números invertidos en el extremo final del velocímetro.
Lo que Alfa no cambia es todo aquello en lo que Giulia y Stelvio ya sobresalían hasta el momento, especialmente un comportamiento en carretera impecable y deportivo al que no son ajenos el empleo de la afamada plataforma Giorgio del grupo FCA, ahora integrado en Stellantis, de materiales ligeros como el aluminio -utilizado para la base de los motores- y el carbono -usado para el eje del propulsor- y de las suspensiones Alfa Link, entre otras señas características de la marca italiana.
Una gama simplificada
Siguiendo el ejemplo del Tonale, los nuevos modelos cuentan ahora con una gama simplificada donde se dispone de dos acabados básicos, Super y Sprint, y dos más lujosos, Ti y Veloce. Las versiones disponibles son: diésel de 160 CV con tracción trasera, diésel de 210 CV con tracción total y de gasolina de 280 CV también con tracción a las cuatro ruedas.
Para celebrar el debut, se presenta la serie especial Competizione, un auténtico concentrado de estilo y tecnología que seguramente complacerá a la apasionada tribu de Alfa Romeo. Basada en el Veloce y disponible con todas las motorizaciones, luce un exclusivo color gris mate que contrasta fuertemente con el rojo de las pinzas de freno. La connotación deportiva se acentúa en el Stelvio con unas llantas de aleación de 21 pulgadas.
En el interior incorpora un sistema de sonido Harman/Kardon y el salpicadero y los asientos tapizados en cuero fino negro con costuras rojas. Completan el equipamiento el cristal de privacidad y el distintivo Competizione emplazado en el panel lateral y el reposacabezas delantero. De serie, esta edición de lanzamiento dispone de suspensión activa y tecnología NFT, que certifica la singularidad de cada unidad y garantiza su configuración original.
El nuevo Giulia está a la venta desde 46.100 euros, en tanto que el Stelvio parte de 53.200. En versión diésel de 160 CV y acabado Super, el SUV grande de Alfa Romeo se puede financiar a razón de 379 euros mensuales, previo pago de una entrada de 10.000. En modalidad de renting a 36 meses, el mismo modelo sale por 539 euros al mes, IVA aparte.