El director de la obra de Belate, adjudicada a Acciona y Servinabar, avanza posibles nuevos sobrecostes

El director facultativo de la obra del desdoblamiento del túnel de Belate, adjudicada por el Gobierno de Navarra en diciembre de 2023 por 62,8 millones de euros más IVA a la UTE de Acciona, Osés y Servinabar 2000, la empresa de Antxon Alonso en la que participaba Santos Cerdán, ha avanzado posibles nuevos sobrecostes, que se añadirían a los ya anunciados por el Ejecutivo foral de 8,5 millones de euros. La UCO de la Guardia Civil ha pedido al juez del Tribunal Supremo Leopoldo Puente incorporar esta obra a la causa abierta por el presunto amaño de obra pública a cambio de comisiones.

Benjamín Lasheras, que ha comparecido este miércoles en la comisión de investigación del Parlamento de Navarra sobre la derivada foral de la presunta trama de Cerdán, ha explicado que “no descarta” un nuevo sobrecoste de la obra. “Hay una parte de la obra que es de instalaciones que prácticamente no se ha tocado porque hay que esperar a tener el túnel hecho, y eso puede generar algún modificado”.

El director de la obra ha añadido que, “como el terreno no está colocado como estaba previsto en proyecto”, se están utilizando sostenimientos pesados, “muchos más de los previstos”, lo que va a suponer que haya un sobrecoste “simplemente por hacer más obra”. “Ya se está produciendo un desvío”, ha indicado, para apostillar que “en realidad no es sobrecoste, simplemente es un desvío de lo previsto”.

UPN, que denunció la adjudicación de esta obra ante la Guardia Civil en 2024 por presuntas “irregularidades”, le ha cuestionado sobre la baja del 20% con la que se adjudicó a la UTE de Acciona, Oseés y Servinabar con respecto del precio de licitación. Benjamín Lasheras ha considerado que la adjudicación se podría haber realizado sin rebaja y seguiría necesitando igualmente un “modificado”. “No descarto nuevas desviaciones, las obras no funcionan así”, ha indicado. Además, ha precisado que “en todas las cosas que se han puesto en el modificado he comprobado que los precios eran razonables, que se corresponden las mediciones, que se corresponde todo a obra real”. “Si yo acepto unas modificaciones en la obra es con mis criterios técnicos”. “En absoluto porque alguien me diga que no sé qué; y de hecho, no acepto modificados que no se sostengan con criterios técnicos y que respondan a algo real”, ha afirmado.

Lasheras ha reconocido, no obstante, que “por desgracia, en prácticamente todas las obras hay modificados”. “Es previsible que haya modificados en todas las obras. Siempre hay; cuando no es porque el proyecto es un poco pobre, es porque han surgido necesidades nuevas o simplemente hay causas de fuerza mayor”, ha dicho, para comentar que “hay miles de cosas que acaban generando modificados”.

El director facultativo de las obras ha afirmado que “en general” el nivel de calidad del proyecto “está bien”, aunque “le faltan cosas”, lo que advirtió nada más ver el proyecto. El Departamento de Cohesión Territorial del Gobierno de Navarra optó, mediante concurso, por la dirección externa de la obra y el contrato fue adjudicado a las firmas de ingeniería TPF y Alauda.

Preguntado por la presencia de Servinabar en la obra, Lasheras ha comentado que había dos personas trabajadoras, “uno llevaba parte de seguridad-salud en el trabajo, era el que fundamentalmente controlaba la entrada de gente al túnel, y otro era uno de calidad, que se dedicaba a pedir los ensayos y comprobar resultados...”. En junio, tras conocerse el informe de la UCO que vinculaba a Santos Cerdán con la empresa Servinabar, las otras dos empresas de la UTE, Acciona y Osés, iniciaron los trámites para excluirla de la misma. Según ha explcado el director de la obra los dos empleados de la mercantil de Antxon Alonso han sido ya relevados por “uno es de Acciona y otro de Osés”.