Merkel y Macron urgen a todos los Estados a solidarizarse con los refugiados

La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Emmanuel Macron, llamaron hoy a todos los Estados miembros de la Unión Europea (UE) a solidarizarse con los refugiados y con Grecia e Italia, los países que más soportan la carga de la crisis migratoria.

En una rueda de prensa conjunta durante la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno en Bruselas, ambos líderes apelaron al papel que debe desempeñar Europa en la defensa de los valores compartidos, encabezada por una “voz común” de Alemania y Francia, y en asuntos como la seguridad, la inmigración o el terrorismo.

La crisis de los refugiados, advirtió Macron, “no es un asunto de algunos países europeos, sino un desafío común de la UE, que implica respuestas comunes”.

“El proyecto europeo es un proyecto de paz, libertad y prosperidad, y la UE debe trabajar con humanidad con los hombres y mujeres que vienen a Europa en busca de libertad”, subrayó Macron, al tiempo que reiteró sus críticas a los países que no han sido suficientemente solidarios con los refugiados, una posición secundada por Merkel.

“La Comisión Europea (CE) tiene la posibilidad de llamar las cosas por su nombre y es lo que tenemos que hacer. Si tenemos inquietudes reales hay que expresarlas y lo apruebo”, defendió Merkel en referencia a los procedimientos abiertos a Polonia, Hungría o República Checa.

Merkel llamó a “ponerse en el lugar de los otros y hacer el ejercicio de llegar a compromisos”.

“Mi concepción de Europa es la siguiente: si estamos juntos en torno a una mesa, si tenemos fronteras exteriores comunes, hace falta que un día me ponga en el lugar de un primer ministro griego,de un primer ministro italiano, que ven llegar todos los días nuevos refugiados”, añadió.

Macron consideró que los países de entrada de los refugiados “son las primeras víctimas”: “No les hemos escuchado”, añadió.

Según las conclusiones aprobadas en la cumbre, los Veintiocho se mostraron preocupados por “el reto estructural” que suponen para la UE los flujos migratorios en la ruta del Mediterráneo central.

“La UE y sus Estados miembros tienen que restablecer el control para evitar un empeoramiento de la crisis humanitaria”, subrayan en el texto.

El primer ministro italiano, Paolo Gentiloni, se mostró satisfecho con el mensaje enviado por los líderes aunque pidió acciones para cumplir con los compromisos adquiridos para la reubicación de los 160.000 refugiados que han solicitado asilo en Italia y Grecia.

“Los problemas a los que nos enfrentamos no pueden resolverse con un documento del Consejo Europeo”, afirmó en una rueda de prensa tras el cierre de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno que se ha celebrado durante dos días en Bruselas.