España pierde la pista del pederasta indultado en Marruecos
Nadie sabe dónde está Daniel Galván. El último contacto de las autoridades españolas con el pederasta condenado por más de 11 crímenes se pierde en el momento en el que las autoridades consulares españolas renovaron su pasaporte. A partir de ahí, según fuentes diplomáticas, Galván abandonó Marruecos por Ceuta y se perdió su pista.
Según la Fiscalía General del Estado, tras el indulto concedido por el rey de Marruecos, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado españoles estaban atados de pies y manos para seguir los pasos del pederasta. Fuentes de la fiscalía, consultadas por eldiario.es, afirmaban este viernes que “no hay razones para ordenar un seguimiento preventivo sobre Daniel Galván si no ha cometido ningún delito en España”.
El rey de Marruecos corrigió esta noche la concesión de indulto para Daniel Galván Viña tras conocer la opinión pública los graves delitos por los que había sido condenado a 30 años de prisión.
La marcha atrás del monarca alauí plantea ahora un complicado problema jurídico que los ministerios de Justicia de ambos gobiernos se han propuesto solucionar al unísono.
Acompañando la concesión del indulto, Marruecos prohibió a Galván volver a entrar en su territorio. Al pederasta se le supone en suelo español y tan sólo se podrá actuar contra él en caso de que se dicte una orden de búsqueda y captura por parte de la Interpol. Sin embargo, fuentes diplomáticas consultadas por eldiario.es señalan que Galván no está localizado y que su pista se perdió en Ceuta.
Según fuentes del Gobierno español, Marruecos será ahora quien pida que Interpol ordene la detención del pederasta. Cuando España reciba esa orden, la policía procederá a la localización y detención de Galván. En ese momento, Galván será trasladado a la Audiencia Nacional que estudiará si procede o no la apertura de diligencias judiciales contra él. Sin embargo a primera hora de la tarde de este lunes, Marruecos ni siquiera había remitido al Ministerio de Justicia español la documentación que revoca el indulto concedido por Mohamed VI.
La dificultad del caso reside en sortear el principio jurídico que impide juzgar a una persona dos veces por el mismo delito. Este precepto, conocido en lenguaje jurídico como “non bis in idem”, plantea las mayores dificultades para procesar a un pederasta condenado cuya situación penal actual se sitúa ahora en un extraño limbo. Galván ha sido indultado pero ese indulto a día de hoy no tiene efecto. Sin embargo, Marruecos se niega a recibirlo en su territorio y aunque lo reclamase España no podría extraditar a un ciudadano a ese país, al no existir entre ambos territorios un tratado de extradición que así lo permita.
La liberación de Galván se produce tras la intermediación del rey Juan Carlos que solicitó de Mohamed VI atención a la complicada situación que atraviesan los presos españoles en las cárceles marroquíes. El monarca alauí respondió con la liberación de 48 presos españoles coincidiendo con la celebración del Día del Trono. Tras conocerse el historial delictivo de uno de los españoles de esa lista, el país vecino fue escenario de protestas y quejas, hasta el punto de que la Casa Real marroquí se ha visto en la obligación de corregir.
A media mañana de este lunes, el Ministerio de Justicia español no había recibido comunicación alguna por parte de Marruecos o Interpol. Hasta la llegada de esa comunicación, España se mantiene alerta y sin posibilidad legal de investigar el paradero de Daniel Galván. Al pederasta se le supone en territorio español pero nadie oficialmente confirma por el momento si las autoridades españolas conocen los detalles de su paradero.