Los afines a Pedro Sánchez aprovechan la debacle que prevé el CIS para exigir que el congreso sea ya
En el PSOE reciben desde hace meses los barómetros del CIS con preocupación. Las encuestas dibujan en los últimos años la importante caída electoral de los socialistas. La peor ha sido la correspondiente al mes de octubre, elaborada en plena crisis del partido. Le otorga el que sería su mínimo histórico: un 17% de los votos. Los afines a Pedro Sánchez han aprovechado ese resultado para redoblar la presión sobre la gestora que preside Javier Fernández para que convoque ya el congreso en el que se dirima el liderazgo.
No es una reclamación nueva. Es la petición que llevan haciendo desde que el Comité Federal decidió que el PSOE debía dejar gobernar a Mariano Rajoy mediante su abstención. El propio exsecretario general aseguró en la comparecencia tras renunciar a su acta como diputado que el mandato de la gestora expiró el mismo día de la investidura del presidente. Sin embargo, el plan de la dirección provisional es alargar el proceso lo máximo posible -hasta primavera- y mientras tanto trabajar en el rearme ideológico a través de ponencias programáticas.
En el entorno de Sánchez consideran que se trata de una excusa para aplazar la batalla por el liderazgo y favorecer a Susana Díaz, que reconoce que ha de limpiar su imagen tras la operación contra el exlíder socialista.
Los datos del CIS han dado un nuevo argumento a los dirigentes que se mantienen fieles a Sánchez para reclamar que el congreso se celebre de forma inminente. El que fue su número dos, César Luena, lo ha expresado a través de Twitter.
El argumento lo han repetido otros dirigentes afines al exsecretario general. Además, prevén que los pronósticos no mejorarán tras la decisión de abstenerse en la investidura de Rajoy. “Visto el CIS y su resultado horrible para el PSOE, está claro que no vamos ni por buen camino, ni con buenos guías. Y puede empeorar”, advierte Ibán García del Blanco, miembro de la Ejecutiva de Sánchez.
La gestora ha evitado pronunciarse sobre el dato, aunque los portavoces oficiales del PSOE lo han vinculado con la 'cocina' del CIS. “No es la primera vez que la cocina progubernamental del CIS refleja unos resultados que luego no se producen”, ha expresado el diputado Rafael Simancas en Al Rojo Vivo (La Sexta). El diputado madrileño ha asegurado que la encuesta tiene “demasiada cocina”. “Solo hay siete puntos de diferencia en intención directa de voto”, ha argumentado.
La caída en estimación de voto es de cinco puntos respecto a hace tres meses y la de intención directa es de 4,4 puntos. “No hay cocina. Otras encuestas dan resultados similares”, expresan fuentes parlamentarias del PSOE.
El argumento de la 'cocina' también fue usado por Sánchez cuando era candidato a la presidencia del Gobierno. En aquella ocasión el CIS pronosticó un 20,8% de los apoyos para el PSOE frente al 22% que logró en las urnas el 20D.
Los dirigentes afines a la gestora creen que el castigo electoral será menor del que temen los de Sánchez y aseguran que tienen encuestas en las que los ciudadanos aprueban que los socialistas se hayan abstenido para “desbloquear la situación”, según explican.
En una entrevista en eldiario.es, Eduardo Madina sostiene que el resultado que arroja la encuesta del CIS es el normal dadas las circunstancias: “No me ha sorprendido. Fue un trabajo de campo hecho en los días posteriores a la peor crisis que ha tenido este partido en muchos años. Lo raro hubiera sido un resultado distinto”, explica. Madina sostiene que es una “foto del instante” y que ahora “el momento es otro” y la realidad demoscópica mejorará. “Dentro de unos meses y unos años, como esto es dinámico, estoy convencido de que variará”, argumenta.
