El Gobierno comienza este lunes a trasladar a la península a los jóvenes solicitantes de asilo que están acogidos en Canarias, cuatro meses después de la orden del Tribunal Supremo. Lo hará con un pequeño grupo de ocho adolescentes que llegaron a las islas en cayuco. Llegan en un clima de tensión por el ataque la inmigración que está impulsando la extrema derecha este verano, y que se ha materializado en la 'caza de migrantes' de Torre Pacheco y la prohibición por parte de PP y Vox del rezo musulmán en los espacios públicos de Jumilla.
El Gobierno ha impugnado este acuerdo hoy. Por su parte, el líder de Vox, Santiago Abascal, criticó este domingo incluso a la Iglesia por su rechazo al veto de la oración musulmana en la localidad murciana: “No sé si tiene que ver con los casos de pederastia”, dijo. Mientras, el PP ha asegurado que defiende la “libertad de culto” pero ha evitado criticar la moción antislámica de Jumilla.