El Gobierno israelí ha defendido este viernes su decisión de denegar la entrada en el país al alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, quien iba a realizar una visita a Jerusalén y a Cisjordania, esgrimiendo que la decisión de boicotear al Estado hebreo adoptada por el Ayuntamiento de la Ciudad Condal “tiene consecuencias”.
“El Gobierno de Israel considera esta medida una manifestación de una política hostil e incitadora contra Israel y sus ciudadanos de manera sistemática, y por ello ha decidido denegar la entrada del alcalde al país”, han justificado fuentes diplomáticas israelís consultadas por Europa Press. Además han recalcado que “no es aceptable que quien actúa para boicotear a Israel y romper vínculos con él pueda ser considerado un invitado bienvenido”.
Por su parte, el alcalde Collboni ha denunciado en redes sociales que “el Gobierno israelí busca aislar al pueblo palestino y ocultar al mundo las constantes violaciones de los Derechos Humanos que sufren”. Tras conocer que no podrá viajar a Israel, ha dejado claro que “este veto” reforzará su “determinación” de seguir trabajando “incansablemente por la paz, la justicia y el reconocimiento de los derechos del pueblo palestino”.
Con información de Europa Press