PP y PSOE se unen en A Coruña para evitar salpicar a Paco Vázquez con un escándalo urbanístico
Hace ahora 23 años, el Ayuntamiento de A Coruña expropió unos solares para la futura construcción de un campo de fútbol en Someso para el equipo de la popular zona de Elviña, el Relámpago. Finalmente, donde debería haber una instalación deportiva se acabó por levantar un centro comercial junto a viviendas, en el que muchos vieron un claro pelotazo urbanístico de entre las tantas sospechas que levantó la política llevada a cabo en este ámbito por el antiguo gobierno municipal liderazgo por Francisco Vázquez.
Casi un cuarto de siglo después, un informe elaborado por dos técnicas municipales apunta directamente el polémico ex alcalde de A Coruña, al situarlo como uno de los responsables directos del denominado caso Relámpago, el mismo que supondrá para el Ayuntamiento un coste de unos 50 millones de euros, entre pérdidas patrimoniales e indemnizaciones. Todo aquel proceso, presuntamente irregular, acabó por beneficiar a empresas de construcción ligadas al presidente de la patronal gallega, Antonio Fontenla, que compartió durante años negocios con Francisco Vázquez.
En el pleno celebrado este lunes se debatió dicho informe realizado por las funcionarias y en cuya elaboración se admitió que la venta de edificabilidad en Someso fue “política más que técnica”. En el mismo documento se responsabiliza a Francisco Vázquez de las presuntas irregularidades, que son investigadas por la Fiscalía, que ya tiene en su poder el informe. Años después, el actual gobierno local del PP no dudó en modificar el antiguo plan para permitir un mayor aprovechamiento a los promotores.
Quizás por eso el PP decidió este lunes mirar para otro lado cuando el BNG solicitó que el propio Ayuntamiento tomara la iniciativa para llevar a cabo acciones por la vía penitenciaria contra Francisco Vázquez y tras las revelaciones que se derivan del informe de las funcionarias municipales. Los populares se abstuvieron, a pesar de las continuas acusaciones que el portavoz, Julio Flores, vertió contra los concejales socialistas que formaban parte del antiguo ejecutivo municipal. Al mismo tiempo, el Bloque solicitó también llevar el tema al Tribunal de Cuentas, una moción que tan sólo fue apoyada por Esquerda Unida.
El PSOE también se abstuvo. “El caso Relámpago no existe”, aseguró la portavoz socialista, Mar Barcón. Su grupo quería que Francisco Vázquez quedara fuera de las futuras medidas a tomar contra los responsables. “No teníamos ni tenemos nada que esconder”, aseguró la portavoz y ex compañera del ex alcalde durante el largo gobierno municipal de Vázquez. “No vamos a participar de ningún linchamiento”, añadió.
Además, el BNG ya denunció antes del pleno que el informe encargado por el Ejecutivo sobre Someso está incompleto. “No hace referencia a las actuaciones previas al caso ni a las posteriores, es decir, a la recalificación urbanística de los terrenos aprobada en el Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) de 1998 ni a los regalos del PP a los promotores”, advierten, después de recordar que el documento no menciona que la causa del pago de las cuantiosas indemnizaciones a los antiguos propietarios de terrenos de la zona fue “la recalificación urbanística aprobada en el PGOM de 1998 y desarrollada en el Plan Parcial de Someso, que contó con el voto en contra del BNG”.
El grupo de la oposición acusa al alcalde, Carlos Negreira, de favorecer a los constructores, en concreto a Antonio Fontenla. “Como propina, el Gobierno local aprobó en septiembre de 2011 dos modificaciones del Plan Parcial de Someso para mejorar el aprovechamiento lucrativo de solares y aumentar el número de viviendas”, destaca el BNG.
