Los contratos temporales de los jóvenes alcanzan el 68,5%
Solo 4.700 empleos se han recuperado en Euskadi el último año. 100.000 desde 2009. “A este ritmo se necesitarían 25 años para recuperarlos. Los jóvenes son los que más sufren la crisis, ya que al estar contratados temporalmente, han sido los primeros expulsados. En caso de que estén empleados, ellos también son los que más sufren las bajadas en los salarios, la mayoría ni siquiera roza los 1.000 euros cada mes. Pero supone un respiro con el que la mayoría se conforma”, afirma Raúl Arza, secretario general de UGT Euskadi. La tasa de desempleo de jóvenes de entre 16 y 24 años alcanza ya el 53%.
La nueva generación es la mejor formada para insertarse en el mundo laboral, pero no hay trabajo. “No hay oferta para reconocer a los jóvenes esa formación. Además, lo poco que hay son contratos temporales o precarios que no dan la posibilidad de establecer un futuro de vida”, lamenta Arza.
Leire Fernández de Labastida tiene 30 años y todavía vive en casa de sus padres. Trabaja en el sector de hostelería desde hace seis años, pero no le llega para ahorrar. “Prefiero un trabajo mediocre que irme y no encontrar nada”. Y este es el problema que tienen muchos jóvenes, “que se conforman con un sueldo mezquino, cuando antes se rechazaban”, afirma el secretario general del sindicato. Ese futuro incierto que se les presenta a los jóvenes provoca que su autonomía dependa de sus progenitores.
Importancia de formarse
Prepararse no exime a nadie de estar en el paro, pero ayuda mucho. De hecho, dos de cada tres jóvenes en situación de desempleo no tiene estudios. A juicio del secretario general de UGT Euskadi, “lo primero que deben hacer es formarse”. Desde el sindicato proponen un programa que fusione la teoría con la práctica, pero “en empresas reales”.
Solo en Euskadi se han perdido 4.700 empleos durante el último año, lo que obliga a los jóvenes a salir en busca de un futuro mejor, “aunque sin estabilidad”, lamenta Arza. Esto provoca que un 10% menos de menores de 25 años estén inscritos como desempleados en el país “debido a que la política del Gobierno les excluye y les obliga a exiliarse para poder sobrevivir”, según denuncian desde UGT.
Solución insuficiente
La salida que propone el Ejecutivo para reducir el desempleo juvenil es “claramente insuficiente” ya que al estar dirigido solo a personas entre 16 y 25 años excluye a un gran número de jóvenes. En este sentido, UGT exige “ampliar el tramo de edad de los beneficiarios hasta los 30 años, dado el alarmante desempleo en los jóvenes de más de 25 años.
