La Federación Asturiana Memoria y República (FAMYR) ha presentado una denuncia contra el Ayuntamiento de Gijón y el Gobierno de Asturias ante la Fiscalía de Sala de Derechos Humanos y Memoria Democrática del Estado y ante el Defensor del Pueblo por su “inacción” al mantener el monumento de “Los héroes de Simancas” que está ubicado en el colegio de La Inmaculada, conocido popularmente como “el de los jesuitas”.
Famyr sostiene que tanto la administración local como la regional incurren en un “flagrante incumplimiento” de sus obligaciones legales en materia de memoria democrática.
Exaltación franquista
La permanencia del monumento en el Colegio de La Inmaculada, antiguo Cuartel de Simancas de Gijón, ha sido denunciado en reiteradas ocasiones por la federación que ha solicitado su retirada por lo que implica de exaltación franquista, “al estar dedicado a los caídos por Dios y por España, en homenaje a los golpistas que asaltaron la legalidad republicana en 1936”.
Su portavoz, Rafael Velasco, asegura que ni el ayuntamiento, ni el gobierno regional han siquiera contestado a las reiteradas peticiones para que se cumpla la Ley de Memoria Democrática.
El silencio administrativo
“Más de cinco años después de la entrada en vigor de la Ley de Memoria Democrática de Asturias y dos años después de aprobarse la ley estatal, el símbolo franquista sigue proyectado sobre el espacio público. Y no por descoordinación o desidia, sino por una política activa de encubrimiento institucional, de complicidad consciente de las administraciones públicas con la impunidad del franquismo”, ha afirmado.
Un silencio administativo que también hace extensivo al gobierno central, que tampoco ha respondido a la solicitud presentada por la federación en julio de 2024.
“La memoria democrática no se defiende con palabras huecas, se defiende actuando contra los símbolos, los privilegios y las estructuras del franquismo todavía vigentes. Cada monumento franquista en pie, cada calle dedicada a los criminales, cada impunidad garantizada -añade- es una afrenta diaria a la memoria de los republicanos, de los antifascistas, de los trabajadores represaliados, de las mujeres perseguidas, de los asesinados en los paredones”.
Posibles responsabilidades
Famyr, sin embargo, va más allá y además de exigir a la Fiscalía y al Defensor del Pueblo que actúen y ordenen la retirada de este símbolo franquista incide en la relevancia de que investiguen las responsabilidades de las personas que, desde el Ayuntamiento de Gijón y el Gobierno regional, “han tolerado” su permanencia.
“No hay democracia sin ruptura. No hay memoria sin justicia. No hay República sin derrocar el legado franquista que aún contamina nuestras instituciones”, expone Rafael Velasco.
Apologia del golpe de estado de 1936
Hace justo un año, Famyr presentó sendas solicitudes, ante las dos administraciones asturianas, para que, en cumplimiento de la legislación de memoria democrática, se eliminase del espacio con proyección pública el monumento a “Los héroes del Simancas”. Pero no obtuvo respuesta alguna.
“Este monumento no es que tenga contenidos franquistas, sino que es desde el primer momento de su construcción, como recoge las grabaciones del NODO de la epoca, una autentica apología del golpe de estado de 1936 y de glorificación, y homenaje público, a sus protagonistas en Gijón”.