La alarma por los incendios en plantas de reciclaje provoca una oleada de cancelaciones de seguros
La alarma generada por los incendios en plantas de reciclaje está provocando una oleada de cancelaciones de seguros en compañías de residuos. Así lo confirma Julio Lorente, responsable del área jurídica de la Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje (FER), que explica que cada vez son más las empresas que cuando se va acercando la fecha de renovación de sus pólizas de seguros se encuentran que su aseguradora no les renueva. “Nos perjudica mucho la imagen que hay, que parece que nuestro negocio es recoger residuos, quemarlos y cobrar la prima del seguro”, señala Lorente, que considera que se están magnificando estos siniestros.
¿Qué está pasando con el fuego en las plantas de residuos? Esta misma semana un incendio en una nave industrial en Alcorcón (Madrid) dedicada al reciclado de papel y plásticos generó una enorme columna de humo visible a decenas de kilómetros de distancia. Solo unos días antes, los bomberos tardaron 12 horas en apagar otro fuego en una planta de Almendralejo (Badajoz). En el recuento de incendios en plantas de reciclaje que lleva el informático Pepe Galindo en BlogSOStenible desde el año 2012 estos siniestros han sido incluidos con los números 210 y 211.
La Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje critica estas informaciones difundidas en Internet, asegurando que contienen muchos errores e incluyen como plantas de reciclaje instalaciones ilegales que gestionan residuos sin autorización. No obstante, la realidad es que los fuegos están aumentando.
“Es cierto que los incendios se están incrementando”, reconoce Lorente, “pero también se está incrementando la gestión de los residuos”. Según defiende, cuantos más residuos, mayor es el riesgo de incendio.
El año pasado, esta federación de recicladores realizó una revisión de los datos de incendios publicados en blogs y medios de comunicación. Según sus propias cifras, los fuegos en 2017 en plantas de tratamiento de residuos habrían llegado a 48, una cantidad bastante por encima de los 28 de 2016, de los 17 de 2015 y de los 12 de 2014. Con todo, los recicladores aseguran que no pueden saber si esos 48 fuegos de 2017 fueron todos en plantas autorizadas e insisten en que en conjunto habrían afectado a menos de un 0,75% de las más de 6.500 empresas del sector.
“Estos incendios muestran el fracaso del modelo de residuos en España”, incide por su parte Juan López de Uralde, exdiputado de Equo en Unidos Podemos, cuyas denuncias provocaron que la Fiscalía General del Estado abriera una investigación.
Según una carta de septiembre de 2018, la Fiscalía no pudo detectar que exista coincidencia o relación entre los incendios, pero sí decidió que a partir de ahora sea obligatorio hacer un atestado policial de todos los fuegos, al haber advertido que no siempre se hacía así, y a su vez exigió un especial rigor a la hora de calificar los hechos desde el punto de vista jurídico penal, pues la mayoría de los siniestros investigados fueron calificados como fortuitos o accidentales.
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