Bravo de Laguna:“Tenerife no aceptaría pacíficamente presidente y vicepresidente de Gran Canaria”
El presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, ha tachado este miércoles de “claramente desnivelado” el pacto de gobierno que negocian CC y PSOE y ha asegurado que si presidente y vicepresidenta fueran a ser de su isla “eso en Tenerife no se habría aceptado de manera pacífica”.
“Estoy absolutamente convencido, porque conozco la política canaria”, ha insistido Bravo de Laguna, que ha salido así al paso de la posibilidad de que en el futuro Gobierno Autónomo sean presidente y vicepresidenta Fernando Clavijo, de CC, y Patricia Hernández, del PSOE, ambos tinerfeños.
Puesto que “eso ya, de por sí, significa un cierto desequilibrio”, ha opinado el político grancanario, que ha sostenido que la necesidad de evitar que ocurra algo así “está, de alguna manera, recogido en el Estatuto de Autonomía”, que, “en ese sentido, fue sabio y dijo que la residencia del presidente del Gobierno sería alternante cada cuatro años”.
Algo que Bravo de Laguna ha dudado incluso que se vaya a cumplir en la nueva legislatura a punto de comenzar en el Archipiélago, en la que ha dicho que “a don Fernando Clavijo le corresponderá, si va a ser presidente del Gobierno, teóricamente, residir en Gran Canaria”.
Añadiendo: “Ya veremos cuántas veces viene a la semana”.
El presidente del Cabildo, que está en el cargo en funciones después de las elecciones del pasado domingo, ha considerado, además,que, “aparte de eso, hay más cosas” que perjudican a Gran Canaria en el pacto que se negocia actualmente para la Comunidad Autónoma.
“Tengan en cuenta que se está fraguando un posible pacto entre CC y PSOE, y CC y PSOE han sacado el 23 % de los votos en esta isla. Por tanto, yo creo que el peso político de Gran Canaria, claramente, en este gobierno está también desnivelado”, ha argumentado.
Y ha agregado que eso es algo que “lo disimularán, darán alguna consejería a alguien”, pero insistiendo en que ello no evitará que persista la situación de perjuicio a su isla.
“Al final, los datos que yo he puesto encima de la mesa durante toda la campaña, de desequilibrio en materia presupuestaria, en el tema de los puertos canarios, en los temas de censos por los que no nos han devuelto lo indebidamente cobrado, de infraestructuras de obras hidráulicas, de carreteras y de mil cosas, la verdad es que eso sigue ahí”, ha insistido, apostillando: “Ojalá se corrija”.
Algo que ha reiterado, en todo caso, que duda que ocurra Bravo de Laguna, que ha vaticinado incluso que la situación empeorará.
“Yo creo que los desequilibrios con Gran Canaria no han desaparecido porque se hayan producido las elecciones, al contrario. La configuración que se vislumbra del próximo gobierno indica que la deriva de la autonomía va a ir todavía más sesgada a favor de la hegemonía de una isla, y eso lo van a confirmar los hechos”, han sido sus palabras al respecto.
Y ha insistido en la tesis de que eso es algo que se repite desde tiempo atrás, porque, “si se cumplen las previsiones y se mantienen todo el mandato, de los últimos 26 años habrá 22 de presidente de Tenerife y, encima, ahora, con la posibilidad de una vicepresidenta” también de aquella misma isla.
Lo cual ha dicho querer denunciar Bravo de Laguna, según ha expuesto, “porque todo el mundo dice: 'Bueno, qué tiene que ver de dónde es', pero siempre es de la misma isla”.