“Creo que la película ‘Serpico’ fue el germen de mi temprana vocación policial”
El inspector jefe de la Comisaría de la Policía Nacional de Santa Cruz de La Palma, Jesús Godoy Ballesteros, presenta este viernes, a las 19.30 horas, la película ‘Serpico’ en el marco del I Ciclo de Cine Jurídico que organiza el Colegio de Abogados. “Es un clásico del cine policiaco, dirigido magistralmente por Sidney Lumet e interpretado de forma extraordinaria por un joven Al Pacino sobresaliente, que obtuvo con esta película su primera nominación al Oscar al mejor actor principal en 1973 y fue ganador del su primer Globo de Oro”, ha recordado a LA PALMA AHORA. “Creo que todos estaremos de acuerdo en que el protagonista es uno de los mejores actores de todos los tiempos”, añadió.
Jesús Godoy eligió ‘Serpico’ porque, explicó, “fue la primera película de estreno que vi; tenía 12 años y salí de la sala impactado al saber que se trataba de una historia real, y fascinado de la integridad y rectitud de su protagonista”. El inspector jefe de la Comisaría de Santa Cruz de La Palma cree que “ahí nació el germen de mi temprana vocación policial. ‘Ser policía significa creer en las leyes, defenderlas de manera imparcial, respetando a todos los hombres…’ Estas son las palabras que escucha Serpico en la ceremonia de ingreso en el Cuerpo de Policía de Nueva York”, subraya.
El argumento, apunta, “está basado en la vida de Frank Serpico, un policía honrado que, ante el recelo que provoca entre algunos de sus compañeros sus constantes negativas a aceptar sobornos, denuncia esas prácticas. Tras sufrir presiones que a punto están de acabar con su vida, decidió testificar para la comisión que investigó la corrupción policial”. “En la película apenas hay un par de secuencias de acción ya que todo se centra en el intenso retrato psicológico de su personaje principal, progresivamente trastornado por una encrucijada surrealista que, incluso, le hace naufragar en su vida privada”, resalta. “Sobre el veterano director estadounidense, fallecido en 2011 a los 86 años, cuesta imaginárselo fuera de un juzgado o de una comisaría, de ahí que los críticos de cine le denominaran ‘hombre de leyes’. No fue algo premeditado el hecho de que sus obras más recordadas tengan un poso de denuncia. No en vano, su memorable debut en 1957 con ‘Doce hombres sin piedad’, película que pondrá el mes que viene el broche de oro a estas jornadas de Cine Jurídico, tenga cierto carácter contestatario”, reconoce.
Jesús Godoy asegura que “el detalle del director en hacer mención a nuestro insigne Cervantes en una secuencia, quizás fuera en referencia al paralelismo de Serpico con un Quijote moderno, enfrentado a unos molinos de viento que, para su desgracia, eran muy reales”. El inspector jefe pone la mirada en “un personaje secundario que, a mi juicio, representa unos valores y entraña un aspecto fundamental en una corporación policial, el inspector Lombardo, quien acoge a nuestro protagonista como si de un hijo se tratara. Lombardo desprende toda la bondad y comprensión de un jefe ejemplar: ‘Si no hay nadie que quiera trabajar contigo, lo haré yo mismo’. Es el compañerismo elevado a las más altas cotas”.
El I Ciclo de Cine Jurídico del Colegio de Abogados, de acceso gratuito, está impulsado por los letrados Carolina Rocha e Ignacio Pastor Teso, aficionados al séptimo arte, y pretende con la proyección de películas de contenido jurídico “crear un foro debate entre los profesionales del Derecho y la sociedad palmera”. “La selección de las películas se trabajó en base a criterios de calidad, con títulos de incuestionable valor cinematográfico. No obstante, el criterio personal del ponente ha sido una excepción a la norma general, y de esta manera, junto a títulos ‘glorificados’ por la crítica, se proyectan obras que se pueden entender como ‘menores’, pero válidas herramientas para que el ponente pueda explicar la película y su relación con el ámbito jurídico”, detallan. “Y como la idea es compartir unos momentos de ocio, como si estuviéramos en el salón de nuestra casa rodeados de amigos, nada mejor que obsequiar a los asistentes con un pequeño detalle: añadir al gusto de la película los sabores de los exquisitos productos de La Palma, por eso, después de cada proyección, hay una cata de vino y delicioso queso palmero con Denominación de Origen”, recuerdan.