Ya no se sueña con dormir en La Caldera

Pasar una noche en el interior de La Caldera de Taburiente es una experiencia, para muchos, inolvidable. Por eso, especialmente en  Semana Santa, Navidad y verano, las reservas para  pernoctar en pleno corazón de esta catedral de la Naturaleza, se solían disparar y, en fechas señaladas de los referidos periodos vacacionales, el Parque Nacional de La Palma, con frecuencia, ponía el cartel de completo. Sin embargo, desde hace unos años, las peticiones  van disminuyendo y, en esta Semana Santa, durante las jornadas de mayor afluencia -jueves y vienes-, la ocupación solo llegará al 36,7% de la capacidad máxima de la zona de acampada, fijada en 120 plazas, según las reservas realizadas hasta este martes, 16 de abril.  En concreto,  únicamente 44 personas han solicitado permiso para pasar esos días en La Caldera de Taburiente.  Para  el fin de semana (sábado y domingo)  solo han sido reservadas siete plazas. Todo indica que, a tenor de los bajos porcentajes de ocupación, dormir al raso en La Caldera ha dejado de ser un sueño para una gran mayoría de excursionistas locales y foráneos,  como ocurría hace unos años.

Según las normas de la zona de acampada, en Semana Santa, Navidad y verano únicamente se puede pernoctar en La Caldera durante dos noches.  Ese requisito, al parecer, se estableció cuando la demanda superaba a la oferta a fin de que se pudiera atender el mayor número de solicitudes posibles. 

La zona de acampada está situada entre el Roque de la Brevera Macha, el Roque Salvaje y el cauce del río Taburiente. En el interior del Parque Nacional no se puede acampar en otro lugar. Desde el punto más cercano al que llega un vehículo,  se informa en la web del Parque, “es necesario caminar por un sendero de unos 6 kilómetros para llegar hasta la acampada”.  Se necesita llevar todo el equipo (tienda de campaña, saco de dormir, etc.).

También  se  indica que está prohibido encender fuego con leña o cualquier otra materia vegetal, el uso del camping gas, velas, fumar, etc.“ y subraya que los usuarios ”se responsabilizarán de cualquier infracción de la Ley de Incendios Forestales, así como de la normativa vigente sobre protección al entorno“.

Igualmente está prohibido entrar con armas de fuego al Parque, perros o algún otro animal y plantas exóticas.

Apunta que los excursionistas “respetarán el arbolado, arbustos, plantas y demás flora y fauna”. Está asimismo prohibida “la recolección de piedras, plantas o animales, dejar basuras en la zona de acampada o cualquier otro lugar que no sean los indicados, usar jabones para el baño en el río Taburiente, y productos contaminantes del agua o de la tierra. También se ”evitarán la emisión de ruidos que perturban la tranquilidad del Parque.

En la zona de acampada “se respetará un horario de descanso nocturno entre las 23.00 y las 07.00  del día siguiente, en el cual se apagarán todas las luces y se mantendrá un silencio absoluto”.