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Opinión - Vivir sobre un polvorín. Por Rosa María Artal

El nacionalista Carlos Alonso inicia su nuevo mandato como presidente del Cabildo de Tenerife bajo la amenaza de una moción de censura

Carlos Alonso, tras recibir el bastón de mando por tercera vez, en este caso de manos de José Manuel Pitti, el consejero insular con más edad

Román Delgado

Santa Cruz de Tenerife —

El presidente electo en el Cabildo de Tenerife, el nacionalista Carlos Alonso (CC), ha tomado posesión de su cargo en el pleno constituyente celebrado a partir de las 20.00 de este viernes en el Salón Noble del Palacio insular, una acto oficial que se prolongó durante algo menos de hora y media.

Alonso, que inicia así su segundo mandato como presidente electo (ha sido máximo responsable de esa administración pública en tres periodos, aunque en el primero de ellos accedió al puesto tras la renuncia de Ricardo Melchior), centró su intervención tras ser proclamado presidente insular en el “qué hacer” por la isla de Tenerife en vez del “quién lo hace”; arrancó su alocución con una larga cita del dramaturgo anglosajón William Shakespeare, y tuvo momentos de gran emoción y sentimiento en partes de su discurso, tanto que tuvo que parar en algunos casos para evitar romper a llorar, sobre todo cuando recordó la importancia y el apoyo de su familia, mujer e hijos allí presentes, y de su abuela ya fallecida. En estas alusiones personales, a Alonso se le hicieron dos enormes nudos en la garganta.

En un pleno de carácter neutro, muy plano en toda su extensión, destacó que Pedro Martín, el líder de los socialistas y de la oposición, tomara posesión de su cargo como consejero insular y luego desistiera de hacer uso de la palabra para defender las políticas de su partido.

Esto se debió, tal y como dijo su sustituta en esa función, la también consejera insular Berta María Pérez, a una “ausencia por motivos familiares” del isorano (para asistir a la graduación de su hija). Este hecho deslució de alguna manera el acto oficial de arranque del mandato insular 2019-23 y sin duda marcó el transcurrir de esa cita pública, que se desarrolló con absoluta normalidad y con una invitación a aunar esfuerzos para construir “el qué” de Tenerife por parte del ya presidente insular Carlos Alonso, un “qué” que pasa, dijo el nacionalista, por reeditar y redefinir el Pacto por Tenerife con el horizonte puesto en 2030.

En la sala estuvieron, entre otros, el presidente en funciones del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, y el exalcalde de la ciudad José Manuel Bermúdez (ambos de CC), en la que es su primera aparición en público tras el duro golpe de perder el poder en la capital tinerfeña.

Antes del inicio del pleno, Pedro Martín sí hizo declaraciones a los medios, en las que, según recoge la agencia Efe, el candidato del PSOE a la presidencia del Cabildo de Tenerife afirmó que no descartaba una moción de censura en esa administración insular, aunque, por el momento, “no hay nada definido”.

Martín también sostuvo que “hoy, día en el que se constituye el Cabildo, no toca especular”. A juicio del también alcalde de Guía de Isora, hablar esta noche de la moción de censura está “absolutamente fuera de lugar” e “incluso sería una falta de respeto”. A esto añadió: “No voy a entrar en una especie de especulación sobre qué puede ocurrir en las próximas fechas”.

CC y PSOE han empatado a 11 consejeros en el Cabildo y la moción de censura socialista podría salir con el apoyo de Ciudadanos (dos representantes) y de Sí Podemos Canarias (tres), que está por la labor. Los tres partidos suman la mayoría absoluta de 16.

Tras la constitución de la mesa de edad y la posterior toma de posesión de sus cargos de los 31 consejeros de la Corporación, se proclamó presidente insular a Carlos Alonso, de CC, el candidato más votado en los comicios del 26M. Luego, se procedió a dar la palabra a los portavoces de los cinco grupos en orden creciente, de los menos votados a los más.

El primero en tomar la palabra fue el portavoz de Ciudadanos (Cs), Enrique Arriaga, un “funcionario de la casa” con “18 años en el Cabildo”. Arriaga se refirió a que la “ilusión y el orgullo de antaño por el Cabildo ha ido desapareciendo” y explicó cómo decidió cuál era el momento de entrar en la política y por qué, para buscar “un cambio necesario”, lo que se hace desde “la parte activa”.

El consejero de Cs reconoció que los resultados electorales de su partido “no fueron tan buenos como se esperaban” y recalcó que el proyecto político de la formación naranja es “de gestión”, “sin clientelismos ni chiringuitos políticos”, quizá la expresión que más lo acercó a la posibilidad de apoyar una moción de censura contra el presidente insular de CC.

Después de Arriaga llegó el turno de la portavoz de Sí Podemos Canarias, María José Belda, que se ciñó a la marca discursiva de su partido y subrayó que la función de la confluencia de izquierdas es contribuir a erradicar lo que llamó un “mar de desigualdades”.

Belda habló de dejar de atender los “intereses de las grandes empresas para atender los de las personas” y se refirió a la necesidad de “recuperar las instituciones” y de “procurar la participación de todos” en ellas.

El siguiente en tomar la palabra fue el popular Lope Afonso, que habló de valores y principios políticos y sociales. Apostó por un “Cabildo mejor para una Tenerife mejor”. Afonso tuvo un cariñoso recuerdo para el trabajo de sus compañeros salientes y aludió a “afrontar los grandes retos de Tenerife” porque “Tenerife está por encima de todo” y este es un compromiso firme de su partido.

Afonso, en un momento en el que sin duda recordó al Pacto por Tenerife de Carlos Alonso, al que su discurso se aproximó, no dejó de insistir una y otra vez en crear una isla “entre todos”. Luego se acercó al final de su intervención con una “mano tendida a todas las fuerzas políticas”.

La sorpresa 'forzada' de Berta María Pérez

Después de la alocución serena, muy tranquila y pausada de Lope Afonso, llegó la sorpresa de la noche cuando, en vez de tomar la palabra el socialista Pedro Martín, lo hizo su compañera Berta María Pérez, que nada más iniciar su exposición aludió a la “ausencia por motivos familiares” del líder de su partido, Pedro Martín.

Berta María Pérez, como ya lo hicieran los anteriores interlocutores, se centró en la necesidad y la voluntad del PSOE de construir un “proyecto claro para solucionar los problemas de la gente ” en Tenerife y no hizo mención directa alguna, ni indirecta tampoco, a la posibilidad de aunar esfuerzos con el resto de partidos para censurar en adelante a Carlos Alonso y así convertir a Pedro Martín en su sustituto, en nuevo presidente insular.

Ya Pedro Martín, antes del inicio de este primer pleno del mandato 2019-23, había dejado claro que esta sesión no iba a ser el momento para tocar el que era gran asunto, y así mismo ocurrió.

Una hora y media después de que el secretario de la Corporación insular tomara la palabra para pedir silencio y proceder a la constitución de la mesa de edad, sonaron los himnos de Canarias y de España (este el último) y se levantó la sesión. Tenerife ya tiene presidente insular y por ahora sigue siendo el nacionalista Carlos Alonso.

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