García-Page asegura que si las reuniones en Navidad se limitan a las familias se puede rastrear el virus

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha vuelto a abogar por una “disciplina” de medidas restrictivas común en el conjunto del país, al tiempo que ha considerado que el hecho de que se permitan reuniones familiares no tiene por qué ser negativo, ya que si los encuentros se circunscriben a este entorno la eventual propagación del virus puede controlarse.

A preguntas de los medios de comunicación, García-Page ha señalado que lo que más “aterra” a las autoridades sanitarias es el índice de propagación en espacios públicos concurridos.

“Las reuniones familiares pueden preocupar, pero se puede rastrear el virus gracias a nuestros equipos de rastreadores, que están funcionando bien”, ha insistido.

Etapa “brillante y expansiva” de la UCLM

Por otra parte, García-Page ha felicitado al rector electo de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), Julián Garde, por su victoria en los comicios de este jueves, después de haber “barrido” en la contienda a su rival y todavía rector, Miguel Ángel Collado. “Casi me da envidia el resultado”, ha bromeado.Durante el acto de inauguración de un nuevo centro de salud en Toledo, García-Page ha mostrado a Garde su “compromiso claro, clarísimo, de remar en la misma dirección para que la etapa que se abre sea brillante y expansiva” en obras y en titulaciones, y con “más proyectos de investigación y más docentes que puedan desarrollar su trabajo.

Una etapa de “plena colaboración, porque hay voluntad y eso es determinante para el futuro de la Comunidad Autónoma”, ha dicho García-Page, quien asimismo ha agradecido al rector saliente y a su equipo su trabajo durante los últimos dos mandatos.

Tras recordar que siendo la UCLM “hija” de la Comunidad Autónoma “tiene solo un camino” que es el de “entenderse con sus progenitores”, ha confiado en que la institución académica entre en “una dinámica de expansión” que pasará también por colaborar en la captación de fondos europeos. En definitiva, una etapa que se abre con “nueva esperanza para todos”, ha rematado García-Page.