Castilla y León estudia traslados a otras Comunidades en un momento de “tensión extrema” con una mortalidad de hasta el 30% en UCI
La Junta de Castilla y León trabaja ya en la posibilidad de trasladar pacientes a las autonomías vecinas como Cantabria, País Vasco o Madrid ante un posible futuro colapso, ya que, actualmente, pese a una situación de “tensión extrema” todavía hay margen para atender a nuevos pacientes en UCIS, donde la mortalidad se sitúa entre el 25 y el 30 por ciento.
Así lo ha avanzado el coordinador de las UCI en Castilla y León, Jesús Blanco Varela, y la consejera de Sanidad, Verónica Casado, quienes han evaluado la situación de la pandemia en la Comunidad en un momento en el que las UCIS están sometidas a una gran presión después de que en dos semanas se haya doblado la cifra de pacientes al pasar de 165 a 320.
Como ha detallado el doctor Blanco tres de cada cuatro camas de las UCI están ocupadas por pacientes con Covid por lo que “la presión de la pandemia sobre el hospital es tremenda”, un punto en el que ha valorado la labor de los profesionales que están sometidos a “un trabajo extenuante”.
Pese a esta situación, según las previsiones del coordinador de las UCI, se esperan más ingresos entre los próximos 10 o 12 días, por lo que ha avanzado que ya se trabaja para tener “margen de maniobra” en el caso de ser necesario para trasladar pacientes a otras autonomías para evitar el “colapso”.
Como ha detallado el doctor el perfil de los ingresos actuales de las UCI registra una caída en la edad media. Así, la media son varones con 64,8 años y “más de la mitad” sin enfermedades asociadas.
Actualmente hay pacientes ingresados en camas de críticos de entre los 20 y los 83 años. “Esta enfermedad afecta a todo el mundo y a personas más jóvenes, los varones registran tres veces más de ingresos que en mujeres, la cuarta parte de los pacientes en críticos son menores de 60 años”, ha explicado Casado.
Del total de los pacientes que ingresan en UCIS el 85 por ciento son intubados y sometidos a ventilación mecánica. “Es una cifra extraordinariamente alta que indica el nivel de gravedad de estos pacientes”, ha señalado el doctor Blanco, quien ha asegurado que entre el 25 y el 30 por ciento de los pacientes de UCI fallecen, un porcentaje “un poco más bajo” que en olas anteriores dada la organización hospitalaria, la celeridad para ingresar en UCI y los avances médicos pese a la inexistencia de un tratamiento específico.
En este punto, Jesús Blanco ha señalado que existe un déficit en enfermería especializada, algo que se palía con una serie de medidas con son los equipos de enfermeras que se componen de profesionales más experimentadas y otras con un menor nivel para asegurar los cuidados adecuados.
Presión asistencial
Casado ha detallado la situación de actividad programada en los hospitales donde se realizan el 32,14 por ciento de las cirugías programadas, un 38 por ciento si se suman los medios externos. Se trata de las intervención de máxima prioridad.
Así, la consejera ha considerado “esencial” que se trate la patología no Covid y ha defendido que las consultas externas se encuentran a un buen nivel global con la suspensión sólo del 8 por ciento y en diagnósticas del 3,4 por ciento.
Los centros que más han sufrido han sido el Clínico de Valladolid que sólo mantiene el 4,66 por ciento de su actividad habitual y el Río Hortega con un 5,5 por ciento. Sin embargo en Ávila se alcanza el 62,5 por ciento; Burgos 38,89 por ciento; Miranda de Ebro 66,67 por ciento; Aranda el cien por cien; El Bierzo el 25 por ciento; León el 25 por ciento; Palencia el 33,3 por ciento; Segovia el 50 por ciento; Salamanca el 24 por ciento; Soria el 42 por ciento; Medina del Campo (Valladolid) 66, 6 por ciento y Zamora 77,7 por ciento.
Además, cuatro de cada diez pacientes ingresados en planta son Covid y se ha detectado muchas habitaciones ocupadas por varios familiares juntos, lo que, como ha señalado la consejera, desvela que la situaicón actual es consecuencia de las reuniones en las fiestas.
0