La reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) del 29 de octubre de 2024 se convocó cuando ya había fallecidos sobre el terreno a consecuencia de la dana, según ha acreditado la jueza instructora de la causa. Además, un largo debate en el seno del Cecopi retrasó la decisión de enviar el mensaje Es-Alert a los móviles de la población. Así lo confirma un nuevo testigo que presenció algunos fragmentos de la reunión: Marco Presa Pasquinucci, entonces asesor de la consellera Salomé Pradas. Presa, según el acta de su declaración del pasado 14 de noviembre, a la que ha tenido acceso elDiario.es, describió ante la jueza instructora la “discusión” sobre el mensaje. Fue un “debate”, aunque matizó que “no fuerte”, sobre “qué tipo de mensaje” se debía enviar. Alguien “proponía una cosa, otro lo rebatía” y “luego se proponía otra cosa”.
Los dos principales técnicos que intervinieron fueron el subdirector general de Emergencias, Jorge Suárez, y el inspector jefe del Consorcio Provincial de Bomberos, José Miguel Basset. “Lo que vio es que el señor Basset se oponía a lo que iba diciendo Jorge Suárez”, afirmó el exasesor, que también incluyó entre las personas “implicadísimas” en el debate a la jefa de prensa del Centro de Emergencias, la periodista Aurora Roca. El testigo matizó que el papel de Roca fue, más que en la decisión en sí, “en la parte redaccional”.
Basset “dijo que no sabía qué tipo de mensaje enviar” ante “cada propuesta que venía por parte de Jorge Suárez”, afirmó el exasesor de Salomé Pradas. “Él proponía otra cosa y se rebatían”, apostilló.
Marco Presa “entiende que entre ellos se pusieron al final en consenso”. En todo caso, el testigo “no vio que nadie se opusiera o paralizara a toda costa ese mensaje”, según reza el acta de su declaración.
La declaración del asesor coincide con la testifical de otro testigo del Cecopi: el técnico Antonio Mira Puerto, quien también detalló algunos aspectos sobre el debate “a nivel técnico” entre Basset y Suárez. La defensa de la exconsellera Pradas aludió en un reciente recurso a las “opiniones radicalmente contradictorias” entre ambos técnicos.
Por otro lado, el testigo también vinculó al jefe de la Unidad de Análisis y Seguimiento del Riesgo, Juan Ramón Cuevas Camps, con la elaboración del texto del mensaje automático a los móviles.
“La redacción del texto del Es-Alert era fundamentalmente obra de Basset, Cuevas y Roca, ésta última utilizó su cargo para comprobar que estaba bien redactado, nada más, no decidió el contenido del mensaje, simplemente para ver que estaba bien redactado, la redacción final la supervisó Aurora como jefa de prensa”, indica el acta de la declaración. Sin embargo, “los que más participaron fueron el Sr. Basset y el Sr. Suárez”.
Miguel Polo y Salomé Pradas, “de bandos contrarios”
El letrado de Compromís, Armando Galán, le preguntó al testigo por la frase que pronunció Salomé Pradas, cuando pidió que alguien llamara a Miguel Polo, presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), para que el organismo se reconectara a la reunión del Cecopi, que permanecía pausada. A Pradas, según captó la cámara de À Punt, no le apetecía hablar con Polo.
“Eran de bandos contrarios”, explicó Marco Presa. “Ella sabía que venía del Partido Socialista y ella era del Partido Popular, era una relación política. Es así desde que él conoce a Salomé y era consellera de Medio Ambiente”, dijo el testigo en referencia al anterior destino de Pradas en el Ejecutivo autonómico de Carlos Mazón.
“Cuando tenían un evento o un acto [Pradas y Polo] se veían, se saludaban, se sonreían y poco más”, agregó Presa. En definitiva, a juicio del testigo, “había un poco de rivalidad política” entre ambos.
Una consellera “estricta” con su imagen en redes
El exasesor de Pradas presenció apenas algunos fragmentos de la reunión del Cecopi, especialmente cuando las cámaras de À Punt y de Emergencias entraban en la sala para grabar planos de recurso.
Presa se definió como el “último mono” en aquella sala. Su “función principal” como personal de confianza era “grabar y fotografiar a la consellera” para alimentar contenido de sus cuentas en redes sociales, especialmente Instagram.
“La consellera era estricta con el tipo de plano y tipo de luz. Ella controlaba todo. Incluso si había levantado un poco o bajado un poco el plano”, según reza el acta de la declaración del testigo.
Mazón “preguntaba mucho”
Marco Presa también relató la llegada nocturna de Carlos Mazón al Centro de Emergencias, ante las “caras de preocupación en todos” los presentes, entre ellos Pradas, Suárez, el presidente de la Diputación de Valencia, Vicente Mompó, y varios altos cargos como el director general Alberto Martín Moratilla o el gerente de la empresa pública SGISE, Raúl Quílez.
“Él pudo ver que Mazón preguntaba mucho, que Salomé también preguntaba y que los técnicos eran los que contestaban”, afirmó el testigo. “No sabría decirle quién tomaba decisiones”, apostilló.
Ya de madrugada, cuando llegó a casa tras el Cecopi, “se puso en la cama a pensarlo” y “no llegó a entender el por qué tanto debate sobre el mensaje”. Marco Presa ofreció a la consellera Pradas acudir a su casa, que compartía con otro asesor del gabinete, a descansar unas horas. “Se dio cuenta de la magnitud de la tragedia cuando ya estaba en su casa”, explicó a la jueza.