La plaza

Las plazas siempre han sido lugar de punto de encuentro de los hombres y mujeres de todas las civilizaciones a lo largo de la historia, si no estoy equivocado. Así que siempre en la historia de la humanidad han representado un lugar transcendente tanto para el comercio, el escarmiento público, el lugar de reunión del pueblo, y otras muchas actividades o como se dice hoy día eventos varios.

Pero en este caso, me quiero referir al simbolismo que ha representado en la propaganda política española y en el mensaje de poderío y fortaleza que se intentaba proyectar a la ciudadanía desde los partidos políticos, cuando se lograba llenar hasta la bandera el coso taurino de turno, es decir la plaza de toros. Hubo épocas pasadas, donde la confrontación antes de las urnas, se media en quien era capaz de reventar el aforo de la plaza y dejar público en la calle, como esas tardes de gran corrida de toros con primeras figuras y ganadería de prestigio.

Viene a cuento toda esta introducción, porque a lo que se ve, el Partido Popular, ha querido a modo de reto y demostración de poderío castizo, recurrir de nuevo al coso de la calle Xativa, para que Pablo Casado, en su gira reciente de venta de su producto, saliese de la plaza, demostrando a sus oponentes políticos que el sí podía llenar el recinto. Y a base de autobuses gratis para los asistentes, bocadillos y algo más, a la vieja usanza, si parece por las imágenes que lo consiguió.

De la faena de Casado, diré que fue un canto a la España imperial, a mi que ya tengo una edad, me recordó los textos aquellos de Formación del Espiritu Nacional , donde lo único bueno era el libro que para la época era una chulada y a la negación si o si de cualquier bondad o acierto del gobierno según él social-comunista que preside Pedro Sanchez y asi de esa manera, por un momento nos traslado a la plaza Roja del Moscu de la ya desaparecida Unión Sovietica. Así que en un visto y no visto cambiamos de plaza, casi sin darse cuenta el respetable.

Del resto de la terna tengo poca noticia, pero si resulta especialmente curioso que en esa competición del yo más que tu, en que consiste aquello de decirle al contrario a que no te atreves, parece un juego pueril que nos traslada a tiempos pasados. Es de agradecer que en tiempos de redes sociales y demás medios digitales, Casado y Teodoro, recuperen tradiciones del pasado y así de paso se reencuentran con insignes personajes como Paco Camps y su peña, y por supuesto los mismos que liquidaron politicamente a Rita Barbera, hagan ahora uso de su persona, pero ya se sabe que a veces lo que promete una gran tarde, acaba de mala manera casi como una capea, aunque teniendo en cuenta como esta el escalafón de los políticos ejercientes en estos momentos no es de extrañar, salvo honrosas excepciones.

El simbolismo de la plaza, debe ser un elemento muy importante para los aparatos fontaneriles de algunos partidos y además da la sensación que en ese aspecto la plaza de Valencia tiene más tirón que el resto de cosos.

Las crónicas que recogieron los medios al dia siguiente, para mi sorpresa hacían más hincapié en el número de asistentes que en el contenido del discurso acalorado y voxero de Casado, ese dato es el que me hizo pensar que en estos momentos donde la tauromaquia anda de capa caída, es una gran idea que los partidos políticos vuelvan a las plazas de toros y se permitan además de esforzarse en colgar el NO HAY BILLETES, aprovechar la furia de sus militantes, simpatizantes, votantes y demás público, para soltar sin rubor alguno todo tipo de mensajes alejados de la realidad y así calentando las gradas, erigirse en ganador de la competición de a ver quien se atreve en lograr el llenazo en la plaza de turno.

Como afortunadamente las plazas en los pueblos y ciudades sirven para muchos más cosas, por ejemplo pasear y conversar, no habrá que tomarse demasiado en serio, ni entrar necesariamente en la provocación de competir por reventar las plazas de toros, para demostrar al adversario y a la gente, poderío y fortaleza.

Como el discurso voxiano del actual PP, me provoca mucho miedo y rechazo, espero que Casado llegue un momento en que se percate que ir de la mano de la extrema derecha de su conocido Abascal, y con el discurso elaborado a base de testosterona y guión de Steve Banon y algunos otros, es un inmenso error además de un atentado a la democracia. Claro que si el presunto relevo es Ayuso y su inseparable rasputin MARodriguez, como dicen los expertos en plazas de toros, que Dios reparta suerte y nos pille confesaos.

*Francisco Asís Serrano Martín, letrado en excedencia de la Sindicatura de Cuentas de la Generalitat Valenciana