València estudia la fórmula para quitar el Bus Turístic al empresario condenado por dar regalos al exvicealcalde del PP
La Concejalía de Movilidad del Ayuntamiento de València ha solicitado un informe a los servicios jurídicos municipales para que explore las posibilidades legales de rescindir el contrato con la empresa Transvía que presta el servicio del Bus Turístico.
La iniciativa viene motivada tras la reciente condena a su responsable, Urbano Catalán, a una pena de nueve meses y un día de cárcel por el delito continuado de cohecho, en concreto por agasajar con regalos al exvicealcalde de València en la época del PP, Alfonso Grau, condenado en la misma causa a cuatro años de cárcel y a una multa de 25.000 euros también por cohecho y además por otro delito de blanqueo de capitales.
El tribunal considera probado que el expolítico del PP recibió regalos de lujo de la empresa Transvia a cambio de contratos públicos en la administración local.
Esta causa se abrió a finales de 2015, cuando el juzgado recibió una denuncia de la Fiscalía contra ambos procesados.
Según el escrito fiscal, Transvia regalaba supuestamente a cambio de contratos relojes de alta gama al exvicealcalde, que el exedil del PP en el consistorio presuntamente cambiaba por otros de precio superior y abonaba la diferencia, sistema que constituiría un blanqueo.
El fallo judicial se hizo público un día después de anunciar el edil de Movilidad, Giuseppe Grezzi, la prórroga de la concesión del servicio del Bus Turístic a Transvía durante un año, ya que el contrato finalizaba el 11 de junio. De esta forma, se garantizaba la prestación del servicio mientras se ultimaba un nuevo concurso.
En febrero de 2016, Grezzi denunció que su predecesor, el edil del PP Alberto Mendoza, prorrogó durante cuatro años el sevicio de Transvía y de Viajes Privilege (la otra contrata del servicio) sin exigir tasa alguna y a tan solo cuatro días de las elecciones municipales.
Entonces, el edil de Compromís ya intentó rescindir el contrato a ambas mercantiles con el objetivo de volver a sacarlo a concurso incluyendo el pago de un canon anual al Ayuntamiento, como sucede en la mayoría de ciudades, pero entonces no fue posible por la elevada indemnización económica que hubiera supuesto. Ahora, en el caso de Transvía, la situación es diferente al haber una condena por cohecho.