“El único daño efectivo alegado por la mercantil S. S.L, es el pago de la elaboración del documento denominado anteproyecto de 'Rehabilitación edificio antiguo almacén portuario 'D' para centro de datos y locales de pública concurrencia en la Marina Real de Valencia'. Motivo por el que este órgano consultivo comparte el criterio de la Administración consultante y considera que la entidad reclamante debe ser indemnizada como consecuencia de la decisión de la Administración de renunciar al contrato con anterioridad a la formalización del mismo, en la cantidad de 23.750 euros”.
El Consell Jurídic Consultiu (CJC) se ha pronunciado en estos términos en la resolución publicada el pasado 20 de noviembre avanzada por Valencia Plaza por la que avala la decisión del Ayuntamiento de València de indemnizar con la mencionada cuantía a la empresa Sineasen SL, adjudicataria del concurso convocado por el anterior ejecutivo municipal de Compromís y el PSPV para implantar un centro de datos en el edificio de los Docks del Puerto de València, que sigue abandonado y sin un nuevo proyecto de futuro.
La empresa aportó en su reclamación al Consistorio un listado de nueve facturas con documentos acreditativos de las transferencias por un importe conjunto de más de 115.000 euros. Sin embargo, los técnicos municipales rebajaron las pretensiones de la mercantil al considerar que muchos de los gastos justificados no estaban contemplados en el concurso. Con todo, la negativa de Catalá a dar luz verde al proyecto que ya estaba adjudicado costará casi 24.000 euros de las arcas públicas.
El edificio de los Docks está cerrado desde 2016 tras varios años funcionando como una discoteca. El Boletín Oficial de la Provincia publicó la licitación del concurso público el 19 de agosto del pasado año, por lo que las firmas interesadas tenían 30 días hábiles para presentar sus proyectos.
Una de ellas fue la mencionada, que anunció la implantación del mayor centro de datos de la Comunitat Valenciana con una inversión de 241 millones. El proyecto consistía en la construcción “de un centro de datos de 20.000 metros cuadrados de instalaciones, acceso a múltiples proveedores de servicios cloud, Internet-Exchanges, y servicios de hosting”. También Nixval y Datium presentaron ofertas alternativas.
La afección de estos proyectos en el edificio protegido fue una de las principales dudas puesto que preveía elevar a cinco alturas el inmueble. La junta de Gobierno local del Ayuntamiento de València aprobó desistir del proceso de adjudicación de los Docks tras conocer que los informes de Abogacía del Estado y de la Autoridad Portuaria de València son desfavorables, si bien es cierto que otros informes municipales avalaban la posibilidad de instalar el centro de datos.
El actual equipo de Gobierno del PP y de Vox considera que el emplazamiento natural para este tipo de instalaciones (Centro de Datos) suele ser naves industriales, y de este tipo de suelo existe suficiente oferta en otros lugares de la ciudad como por ejemplo los polígonos Industriales de Vara de Quart u Horno de Alcedo, así como en el resto del área metropolitana de València.
Críticas del PSPV
El Grupo Municipal Socialista ha criticado la decisión del equipo de María José Catalá. El concejal Javier Mateo ha lamentado que “una vez más la incapacidad y el desconocimiento de Catalá y su equipo respecto a lo que necesita la ciudad de València y su sectarismo para no continuar ninguno de los proyectos que venían de anterior mandato le cuestan dinero a los valencianos y valencianas”
Mateo ha añadido que “si la señora Catalá no tiene proyecto para la Marina, excepto torpedear los proyectos que dejó en marcha el PSPV, lo que tiene que hacer es salir a pedir perdón a los valencianos y valencianas por engañarlos una vez más y no continuar vendiendo al mejor postor lo que debería ser un emblema para la ciudad de Valencia como es la Marina. En lugar de hacer crecer la ciudad se ha dedicado a vender el espacio estratégico para la ciudad”.