La Generalitat modificará la ley de la huerta para recuperar suelo cultivable en un máximo de ocho años
El Gobierno valenciano quiere que los ayuntamientos participen del plan de recuperación de la Huerta y propone una modificación de la ley aprobada el pasado año. A través de la conselleria de Obras Públicas y Vertebración del Territorio se ha abierto el periodo de exposición pública para modificar el artículo que determina la declaración de los enclaves.
La intención del departamento que dirige Arcadi España es incluir la modificación en la ley de acompañamiento a los presupuestos, que suele aprobarse a final de año junto a las cuentas para el próximo ejercicio, y con ello acelerar los planes de recuperación de los cultivos.
La ley de la huerta define los enclaves como “superficies de terrenos degradados sobre las que hay edificaciones en situación de ruina o en mal estado de conservación o son suelos sellados sin edificaciones o escasa presencia de las mismas, todos ellos sin valor patrimonial significativo y sobre los cuales habría que hacer actuaciones de regeneración de la huerta para destinarlos a explotación agraria efectiva”.
Según el plan de acción territorial, que desarrolla la primera norma, esta figura propone revitalizar dos tercios del suelo a cambio de edificar -rehabilitar los edificios en mal estado, en este caso- el tercio restante. Así, los propietarios tienen la obligación de destinar dos partes a cultivos y una tercera para uso residencial o compatible con la restauración, alojamiento hotelero, gastronomía, ocio y movilidad sostenible, como marca la normativa. El plan determina 54 enclaves en la huerta de Valencia, con una superficie aproximada de 500 hectáreas, aunque abre a los ayuntamientos la posibilidad de incluir unos nuevos, siempre que se acredite la degradación del terreno.
La propuesta de modificación fija un limite de cinco años desde la aprobación del plan para que los ayuntamientos insten a la declaración de estos espacios. El objetivo es agilizar la recuperación de los terrenos de huerta y las edificaciones degradadas, según explican desde el departamento de Arcadi España. Así, se promueve que los ayuntamientos impulsen esta figura de recuperación del territorio en un plazo de cinco años y se les dan otros tres para su ejecución, para, en ocho años, sumar terreno recuperado.
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