Inditex ha presentado este miércoles sus resultados del primer trimestre de su año fiscal, que ha cerrado con cifras récord. Su beneficio se ha disparado un 80%, hasta los 760 millones de euros; y sus ventas, un 36%, a 6.742 millones. Son los primeros datos financieros de Óscar García Maceiras como consejero delegado de la dueña de Zara; y de Marta Ortega, como presidenta no ejecutiva de la compañía.
Más allá de los datos puros, la cita con el mercado de Inditex también sirve para saber por dónde va la estrategia de la compañía de cara a los próximos meses y en una situación global tensionada tras la invasión de Rusia a Ucrania, que obliga a Inditex a no operar en ambos mercados. También, con la inflación disparada a escala global.
En ese contexto, la multinacional da pistas de por dónde va su negocio. Una de ellas es que, de momento, España no está entre los países donde cobra por la recogida de las prendas que se compran online y se devuelven desde los domicilios o puntos de entrega.
Una estrategia que comenzó en Corea del Sur y que ya extiende por 38 países -está en 200 mercados-, donde cobra 1,95 euros (o el equivalente en su moneda local) por recoger esas prendas. En cambio, no cobra si estas se devuelven en tienda.
Búsqueda de “eficiencia y sostenibilidad”
“La razón es buscar una mayor eficiencia en ingresos y en sostenibilidad. La respuesta es positiva, no hay un impacto en ventas. Hay más devoluciones en tienda”, ha asegurado Marcos López, director de Mercado de Capitales de Inditex, durante la conferencia con los analistas que siguen la evolución de la empresa. “Es una medida que puede continuar para hacer la industria más eficiente y sostenible”. De momento, según explica el grupo, España no está incluida en esta estrategia.
Este paso se da en un momento donde las ventas online han pisado el freno, después del despegue en el primer trimestre de 2021, donde había más restricciones en las tiendas físicas por la pandemia. “La venta online a tipo de cambio constante ha sido un 6% inferior por el fuerte comparable”, apunta en su presentación de resultados, en referencia al crecimiento del 67% que registró en el primer trimestre de 2021. “Se espera que la venta online supere el 30% de la venta total en 2024”, añade.
Otra de las cuestiones a futuro es el impacto de la inflación. En la última presentación de resultados -aún con Pablo Isla como presidente- la matriz de Massimo Dutti, Bershka o Pull & Bear ya adelantó que la multinacional haría subidas selectivas de precios para proteger sus márgenes. Un alza que, de media, en España estaría en el entorno del 2%. Un repunte de precios que han seguido otras compañías, como la cadena 'low cost' Primark.
Este miércoles, García Maceiras ha vuelto a indicar que Inditex llevará a cabo ajustes de precios por formato y producto y en función de cada país, “en determinados mercados”, ha señalado. En todo caso, ha matizado, serán de un solo dígito y no suponen un cambio en su política de precios.
En cuanto a la situación en Rusia y Ucrania, el grupo de Arteixo indica que “ha decidido provisionar en su totalidad los gastos estimados para el ejercicio 2022” en ambos países, lo que le ha supuesto un “cargo extraordinario por 216 millones de euros”. Solo en Rusia, el grupo contaba con más de 500 establecimientos, que decidió cerrar a principios de marzo.