Un activista por la memoria histórica denuncia amenazas y daños tras un homenaje a víctimas del franquismo
Un investigador y activista de la memoria histórica ha denunciado ante la Guardia Civil los ataques y amenazas que ha sufrido tras el homenaje a las víctimas asesinadas por el franquismo celebrado en Calera de León (Badajoz).
El pasado 1 noviembre numerosas personas se congregaron junto a la fosa común del cementerio de este pequeño municipio, donde se encuentran documentadas al menos 16 víctimas. Tras comprobar que la bandera republicana del acto había sido arrojada a la basura, Fernando Fernández fue increpado por un vecino bajo insultos en la puerta de un bar. Según ha denunciado le impidió el paso mientras le insultaba y le cantaba el ‘Cara al sol’ con el saludo fascista.
Este mayor jubilado evitó entrar en conflictos, pero la situación empeoró a lo largo del fin de semana. Su coche ha amanecido rayado, con las ruedas pinchadas, y ha recibido nuevos cánticos de ‘cara al sol’ en plena calle. Ante estos hechos y las amenazas ha interpuesto una denuncia ante la Guardia Civil de la vecina localidad de Monesterio.
Lleva años trabajando codo con codo con la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica en Extremadura ARMHEX y ha sacado un trabajo que documenta la vida de los niños del franquismo en Calera.
El pasado fin de semana se instaló allí la exposición ‘Tras las huellas de la memoria en Extremadura 1936-2017’, que muestra a modo de retrospectiva todo el trabajo que ha hecho el colectivo memorialista, y que profundiza en la exhumación de decenas de personas represaliadas. También en el proceso de investigación histórica y la búsqueda de testimonios de familiares.
Exhumación de la fosa
En este momento se encuentran en conversaciones con el ayuntamiento para poder exhumar los restos de las personas que permanecen en la fosa del municipio, que sufrió una fuerte represión franquista según explica la ARMHEX.
Comenta que a lo largo de su trabajo investigador ha sufrido amenazas desde perfiles falsos en las redes sociales, aunque la situación ha cambiado y ahora se siente inseguro. “Han pasado de las palabras a los hechos, y estoy preocupado”.
