Euskadi abona desde 2014 26,18 millones en indemnizaciones por negligencias médicas, aunque gana el 78% de los juicios

El Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) ha tenido que costear, a través de sus seguros, indemnizaciones por valor de 26,18 millones de euros entre 2014 y 2023 por negligencias médicas con daños a los pacientes, según datos facilitados en las últimas horas al Parlamento por la consejera Gotzone Sagardui a instancias de Rebeka Ubera (EH Bildu) y Laura Garrido (PP), que habían formulado preguntas similares. Es el 12,61% del total de cantidades reclamadas por los afectados en ese período, 207,58 millones de euros, ya que la Administración gana casi el 78% de los juicios. Como cifra estimativa, la compensación media abonada podría rondar los 277.638 euros.

La cantidad anual destinada a este tipo de pagos oscila entre los 1,6 millones de 2022 y 2014 hasta los 3,6 de máximo en 2017. En lo que va de 2023 se han abonado 2,6 millones de euros -aunque quedan doce por resolver- y 2020, el año de la llegada de la COVID-19, la cuantía fue de 2,9 millones. Lo que sí ha subido en los últimos meses es el porcentaje de indemnizaciones en relación a las peticiones. Está siendo del 17,99% en 2023, notablemente por encima de la media. Adjunto se puede ver el cuadro completo.

El informe solicitado por EH Bildu es algo más detallado e indica que entre 2017 y 2023 se han celebrado 311 juicios contra Osakidetza con 70 sentencias favorables a los pacientes, un 22,5% del total. Se aprecia en este período una caída de los procesos, con 67 en 2017 y 19 en lo que va de 2023. Fueron 29 en 2022, el último año completo. De hecho, desde 2017 sin excepción son cada vez menos las condenas a la Sanidad pública vasca, 17, 16, 11, 10, 8, 5 y 3. Solamente en 2017 se han cerrado tres casos con un acuerdo extraprocesal, del que no se dan detalles.

Con los datos exclusivamente de ese sexenio, la indemnización media es de 277.638 euros, lejos de la reclamación media, de 407.327 euros. Fuentes de Salud admiten que son datos muy elevados y que los errores médicos son costosos, aunque recalcan que el porcentaje de negligencias probadas en relación al volumen de actos médicos y diagnósticos que diariamente se realizan en Osakidetza es “ínfimo”.

Semanas atrás, Sagardui también informó al Parlamento de la evolución de las quejas y reclamaciones. Hasta septiembre de 2023, fueron 36.060, sumadas ambas categorías. Representan una subida con respecto a las 32.691 del mismo período de 2022 y más que todas las registradas en 2017 /34.501), en 2018 (35.834), en 2019 /32.446), en 2020 (29.601) y en 2021 (34.956). La coalición EH Bildu ha remarcado en sus últimas intervenciones que esta estadística es una muestra de la “decadencia” de la calidad del Servicio Vasco de Salud.