Equo llama a la confluencia
Extremadura, como el resto del estado, vive un momento que se percibe como excepcional desde muchos ámbitos, pero en política esa percepción es mucho más nítida. Tras los movimientos sociales que en 2011 tuvieron su clave en el 15M, la respuesta política a la política tradicional, y a sus actores de siempre, anclados en unas maneras y estilos eternamente repetidos, viene tomando forma en el espectro de las entidades nacidas en estos años.
Partidos políticos han nacido varios; Equo, Partido X, Podemos... y otros con más trayectoria han tomado fuerza como M+J y Pirata. Dentro de ellos existen diferencias evidentes en el modelo de estructura; desde las más clásicas en su verticalidad y estructura piramidal, a pesar de ser originariamente asamblearias, como Podemos, hasta formaciones asamblearias, abiertas y paritarias como Equo . Pero si hay un elemento novedoso en todo este panorama, es la aparición de Ganemos/Guanyem, donde es menester conservar el catalán original, por una deferencia a su origen, y sus hermanas Mareas gallegas.
A pesar de mi militancia en Equo, he de confesar que mi preferencia se sitúa en este último modelo señalado, que desde mi punto de vista está llamado a ser el futuro más inmediato y feliz de las formas de organizarse las instituciones políticas. Las estructuras excesivamente marcadas por los requisitos legales, las cuestiones ideológicas y los individualismos, aunque luchen por desprenderse de ellos, no podrán hacerlo completamente mientras no completen el proceso de apertura y cooperación que implica el moverse en los nuevos planteamientos de la política tras el 15M.
Cooperación es la clave de este nuevo paradigma político. Se trata que desde diferentes planteamientos ideológicos, se pueda cooperar llevando a cabo un objetivo común, donde pueden confluir partidos, asociaciones, movimientos sociales, personas,... en igualdad de condiciones y sin unos requisitos previos que no sea el propio objetivo de cooperar por el buen vivir, por ese bien común, por ese priorizar a las personas que hasta ahora se ha obviado permanentemente. La formación de una cooperativa política, era hasta hace poco más extraa a la política que a la ñeconomía, donde el término cooperativa se ha estado aplicando en muchos casos a entidades igualmente piramidales a las sociedades anónimas o limitadas de siempre. Pero hace poco ha irrumpido en el panorama político, tras algunos intentos de partidos como M+J, CHA, Compromis, Equo, etc... que pusieron en marcha Primavera Europea para las pasadas elecciones al parlamento europeo, lo que se ha venido generalizando bajo la denominación Ganemos.En Extremadura la fórmula Ganemos está presente en 4 localidades de manera informada hasta el momento; Almendralejo, Hervás, Cáceres y Badajoz, por orden de antigüedad. Existen variantes entre ellas, como debe ser, y cada una intenta responder a la realidad de su localidad y de su gente.
Unas cuentan con el apoyo de unas fuerzas políticas y en otras aparecen o desaparecen en función siempre de las personas que las componen, como debe ser, porque así es como deben plantearse las cosas en política, como en economía; las personas son las que marcan las diferencias. Es cierto que en todas coincide Equo, pero quizás es porque el compromiso por esta forma diferente de asociación política está más acorde con sus principios y con su gente que en otros casos, además de figurar en todas las resoluciones de los últimos diez meses. Pero este proceso municipalista debe seruna muestra de lo que debe ser en otros niveles institucionales la forma de relacionarse partidos, movimientos sociales y ciudadanas.Porque se viene un nuevo paso; el autonómico. Y es en este nivel donde las expectativas son más difíciles de alcanzar si nos planteamos la posibilidad de un Ganemos. Y es tan difícil como necesaria.
Para ello vamos a tener que apelar no a las uniones frentistas de otros tiempos, sino a la responsabilidad y las ganas de trabajar juntos, de cooperar en serio, abandonando los partidismos e individualismos, con las miras puestas en dar la opción a la ciudadanía de llegar a las instituciones autonómicas. Ganemos Extremadura debe ser una realidad que además de contar con el trabajo de las personas interesadas en ello, tenga el compromiso de cooperación de la mayor cantidad de grupos políticos, que bajo un código ético, unas fórmulas claras y abiertas, y un programa consensuado surgido de la ciudadanía, se comprometan a respaldar una candidatura surgida de listasabiertas y paritarias. Hay personas, las conozco, que creen que esta sería la vía correcta; solo queda tomar la decisión personal, fuera de las obsoletas disciplinas de partido, si no somos capaces de convencerlo, de ponerse a ello.