Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

30 años de solidaridad en Extremadura

Celebración del 30 aniversario de la cooperación extremeña y de CONGDEX en la Asamblea de Extremadura

0

El contexto sociopolítico internacional actual está marcado por un aumento alarmante de conflictos armados -como los de Palestina, Ucrania o Sudán-, la expansión de discursos xenófobos y el desplazamiento forzado de millones de personas. Lamentablemente, frente a este panorama muchas instituciones optan por mirar hacia sí mismos y levantar muros, reduciendo los fondos para la cooperación y la ayuda humanitaria, cuando más necesarios son.

Se cumplen 30 años de la cooperación extremeña: en 1995, por un lado, se institucionalizan las primeras ayudas a proyectos de cooperación para el desarrollo desde Extremadura y, por otro, un grupo de organizaciones extremeñas crea la Coordinadora Extremeña de ONGD, una red de diversas organizaciones sociales, que promueven la defensa de las políticas de cooperación en nuestra región.

Esta comunidad autónoma apostó entonces por una política de cooperación descentralizada, que no sólo buscaba apoyar a países del Sur Global sino, también, generar una ciudadanía más crítica, empática y global. A través de proyectos de educación y de sensibilización, se sembró en la región la semilla del compromiso con los derechos humanos y el desarrollo sostenible.

No podemos olvidar que Extremadura también ha sido durante décadas una región receptora de ayudas. En los años 90, Extremadura era una de las regiones más desfavorecidas de España. La cooperación internacional se convirtió entonces en una herramienta de transformación económica y social sino, también, de conciencia solidaria con otros territorios del mundo.

En esa cooperación internacional, especialmente la procedente de la Unión Europea, pudo apoyarse Extremadura para realizar cambios económicos y sociales pero, también, para darse cuenta de las realidades de otras regiones y territorios con las que debíamos ser especialmente SOLIDARIAS, en nuestra lucha contra las desigualdades y la pobreza. 

Es un periodo en que la cooperación extremeña pasa de un modelo asistencial a uno basado en derechos, corresponsabilidad y horizontalidad. Tres décadas después, ese compromiso se ha recordado en la Asamblea de Extremadura durante un acto conmemorativo lleno de simbolismo.

La cooperación como identidad compartida

Durante tres décadas, los proyectos impulsados por las organizaciones extremeñas han contribuido al empoderamiento de comunidades locales y han servido como espejo crítico para la sociedad extremeña, impulsando la reflexión sobre el consumo responsable y las conexiones entre lo local y lo global.

En palabras de Lidia Rodríguez, “frente a la desigualdad creciente, la respuesta no puede ser la indiferencia, sino más cooperación, más compromiso y más derechos”.

En un clima global donde crecen la polarización y el miedo, la educación para el desarrollo y la ciudadanía global se consolida como un antídoto esencial frente a la intolerancia. 

Pese a los avances, persisten desafíos importantes. La cooperación y la educación para el desarrollo requieren voluntad política, recursos y continuidad, además de adaptarse a los nuevos retos: digitalización, crisis climática y migraciones forzadas.

Celebramos que el camino recorrido en estas tres décadas demuestra que Extremadura ha sido protagonista de un cambio solidario y consciente. La cooperación y la educación no son sólo herramientas que transforman lugares: son también la llave con la que esta región ha abierto puertas a su propio desarrollo, cultivando una identidad basada en la justicia social, la inclusión y la solidaridad.

Desde Extremadura, se debe seguir apostando por el fortalecimiento de políticas de ayuda humanitaria, educación y cooperación internacional como respuestas éticas y necesarias. Nuestras instituciones políticas deben promover la dignidad, la equidad y los derechos humanos, valores que sostienen la democracia y la convivencia pacífica.

30 años de defensa de lo común como resistencia, de la educación como clave de futuro, de la solidaridad y la justicia como raíces.

Etiquetas
stats