Yoanki Mencía ya no es jugador del Básquet Coruña. El club, que milita en la Primera FEB —la segunda categoría del baloncesto español— rescindió el contrato de mutuo acuerdo con el alero después de que éste se declarase culpable de un delito de violencia de género, uno de los tres cargos de los que lo acusaba su expareja. Los hechos sucedieron cuando el cubano formaba parte de la plantilla del Casademont Zaragoza y Coruña los desconocía cuando lo incorporó a su disciplina, el pasdo 30 de junio.
Fue unos días después de su fichaje, según relata el propio club en un comunicado, cuando tuvieron conocimiento “a través de un mensaje anónimo privado recibido en las redes sociales de la entidad”. Tanto el agente como el Zaragoza reconocieron entonces estar informados de la existencia de las denuncias, mientras el jugador “defendió su inocencia desde el primer momento”.
“Durante este tiempo, el Club ha respetado la presunción de inocencia y el derecho del jugador a defender su postura ante las autoridades judiciales”, continúa el comunicado. La postura cambió tras la declaración en sede judicial de Mencía, el pasado 16 de octubre, donde se reconoció responsable de parte de los delitos de que fue acusado. Fue en ese momento cuando el Basquet Coruña apartó al jugador de la disciplina del primer equipo. Una semana después, este miércoles, hizo efectiva su salida.
Horas antes, el alero publicaba un comunicado en el que pedía perdón y solicitaba “una segunda oportunidad”. “Me he declarado culpable de un delito de malos tratos. La justicia ha dictado una sentencia y cumpliré con cada una de las medidas impuestas”. “Me gustaría pedir disculpas a las personas afectadas por esta situación, así como a mi familia, a mis compañeros de equipo, a mis clubes y a todas las personas que me han apoyado”, añadía.
Además de la salida de Mencía y “como medida inmediata para salvaguardar los valores de la entidad”, el Basquet Coruña se comprometió a “reforzar” el reglamento de régimen interno que rige la conducta y la disciplina de los jugadores. En la faceta deportiva, el hueco que deja el jugador cubano ya ha sido cubierto por el alero serbio-montenegrino Dino RadonÄić.