Casado cuestiona ante Rajoy la cifra de víctimas de coronavirus en su primer mitin de campaña en Galicia

El periplo electoral de Pablo Casado en Galicia ha comenzado en el tradicional mitin que reúne al PP en la plaza de toros de Pontevedra. En él, el presidente del Partido Popular ha arrancado su discurso tirando del argumentario del partido y reclamando al Gobierno central que “aclare” la cifra de muertos en España a causa de la pandemia. “Quiero empezar acordándome de todos los gallegos que han perdido la vida y también de esas más de 40.000 familias que non han pedido despedirse”, indicó el líder del PP frente a una cifra oficial de fallecimientos que permanece en más de 28.300.

A partir de ahí, Casado se repartió entre los ataques al Gobierno central, presentar al PP como un partido de unidad y loar el trabajo de Alberto Núñez Feijóo. “Somos el país con más sanitarios contagiados, hemos sido el país con más muertos del mundo en comparación con el número de habitantes. Por lo tanto, algo habrán hecho mal y algo podremos decir para que se puedan fijar en nosotros para salir de este atolladero”, argumentó Casado. El presidente del PP comparó a continuación su papel en la oposición durante la gestión de la crisis con la que se produjo durante otra pandemia, “mucho menos grave”, la del ébola: “Nos denunciaron como nación en la Unión Europea por el sacrificio de un perro de una enferma de ébola. Nos hicieron escraches en la puerta del hospital. Nosotros no hemos hecho eso. Todo lo contrario, nosotros estamos apoyando a España en la Unión Europea”.

Casado consideró que el PP “ha estado a la altura de las circunstancias” durante la crisis sanitaria, tanto desde las comunidades que preside como desde la oposición. Se apoyó para ello en las votaciones a favor del estado de alarma -sin mencionar en las que estuvieron en contra-, en la aprobación de un decreto “insuficiente” de la nueva normalidad y en la actitud del PP en la comisión parlamentaria de reconstrucción en la que participó la gallega Ana Pastor que se encontraba esta mañana en el limitado público que pudo acceder a la plaza de toros. “Hemos tendido la mano para un pacto de reconstrucción”, aseguró Casado, que dijo mantener la esperanza de que se convierta en un pacto de Estado. El presidente del PP se esforzó en resaltar a su formación como un partido con sentido de Estado, que envía “mensajes de unidad” y que “cobija a los españoles que quieren vivir tranquilos”. Para ello, reivindicó el “legado” de los presidentes José María Aznar y Mariano Rajoy, que participó en esta jornada en su primer mitin de campaña, en su casa, y se llevó el aplauso más largo de los asistentes.

Sánchez, en Galicia para “insultar a Feijóo”

El acto del PP coincidía con la primera incursión de Pedro Sánchez en la campaña gallega. Casado, que estuvo el pasado fin de semana en Santiago para la presentación de las listas y tiene previstos otros cinco actos en la comunidad, aprovechó para afirmar que el líder socialista “ha venido muy poco a Galicia” en los dos años que lleva como presidente. “Prácticamente ha venido a insultar a Feijóo”, aseguró sobre Sánchez, al que comparó con un futbolista que le gusta que el terreno esté embarrado para que no ruede bien el balón. “A ver si antes de volver a Madrid en esa caravana de 12 coches se compromete con Galicia”, retó Casado, que mencionó expresamente la situación de la planta de Alcoa en A Mariña lucense y de las empresas situadas en la costa como la papelera Ence en Pontevedra, afectadas, dijo, por la nueva ley de cambio climático.

En esa línea, Casado acusó al Gobierno de Sánchez de poner “zancadillas” a las comunidades fuera del color socialista y de “jugar al Risk” con el mapa de España. “Quita chinchetas dónde no puede gobernar”, aseguró.

Por su parte, Mariano Rajoy, que agradeció que se contara con él para este arranque de la campaña gallega, se centró en defender la figura de Alberto Núñez Feijóo como “una garantía de futuro”, “un presidente en los momentos difíciles” y que “no hace política doctrinaria ni sectaria”. Sus palabras, al igual que las de Casado, resaltaron la línea de la campaña del PP gallego que presenta a Feijóo como el candidato con experiencia, que ofrece un gobierno “sereno” frente “a un bipartito [en referencia al que Gobernó la Xunta entre 2005 y 2009] que ahora se multiplica porque son cuatro”, las formaciones de izquierdas que luchan por doblar la cuarta mayoría absoluta que busca el PP.